ABARES, la Oficina Australiana de Economía, Ciencias Agrícolas y de Recursos, ha publicado su informe de cultivos de Australia - febrero de 2021 y estima que la producción nacional de cultivos de invierno 2020-21 será la segunda mayor cosecha registrada.
El director ejecutivo interino de ABARES, Jared Greenville, dijo que se estima que la producción de cultivos de invierno ha aumentado en un 89% en 2020-21 a 55,2 millones de toneladas.
"Esto es un 7,4 por ciento más alto que el pronóstico presentado en el informe de cultivos de diciembre de 2020", dijo Greenville.
“La revisión al alza fue el resultado de que los rendimientos siguieron superando las expectativas a medida que avanzaba la cosecha, especialmente en Nueva Gales del Sur y Australia Occidental.
“Se estima que la producción de trigo aumentó un 120 por ciento en 2020-21 a 33,3 millones de toneladas. La producción de cebada ha aumentado en un 45 por ciento a 13,1 millones de toneladas. La producción de canola aumentó en un 74 por ciento a 4,1 millones de toneladas. De igual modo, se pronostica que la temporada de cultivos de verano 2020-21 será mejor que el año pasado, pero aún estará por debajo del promedio. El informe prevé que la superficie sembrada con cultivos de verano es de 1,04 millones de hectáreas, casi tres veces mayor que en la temporada 2019-2020, muy afectada por la sequía.
Greenville dijo que se espera que las perspectivas de rendimiento se beneficien de las perspectivas favorables de las lluvias y de las temperaturas suaves previstas para el otoño.
"Se pronostica que la producción de cultivos de verano aumentará a 3,3 millones de toneladas en 2020-21"- dijo Greenville - “Esto es alrededor de un 13% por debajo del promedio de 10 años hasta 2019-2020 porque el área plantada permanece por debajo del promedio debido a la siembra limitada en Nueva Gales del Sur debido a las grandes plantaciones de cultivos de invierno y un mal comienzo de la temporada de cultivos de verano en algunos áreas de Queensland. Se estima que la superficie plantada con sorgo en grano aumentó en un 258% en 2020-21 a 511.000 hectáreas. Se pronostica que la producción aumentará en un 409 por ciento a 1,5 millones de toneladas. La superficie sembrada con algodón aumentó un 395% en 2020-21 a 295.000 hectáreas, impulsada por la mejora de la humedad del suelo y un mayor suministro de agua de riego en la mayoría de las regiones productoras de algodón. Asimismo, se pronostica que los rendimientos estarán por debajo de la media debido a una proporción de algodón de las tierras secas superior a la media en el norte de Nueva Gales del Sur y el sur de Queensland. El algodón de las tierras secas rinde menos que el algodón de regadío”.
