El Pleno del Consell ha validado la declaración de emergencia de suministro del organismo de control biológico Cryptolaemus montrouzieri para el control de la plaga de cotonet en la Comunitat Valenciana para la campaña 2021.
Las sueltas masivas del depredador se iniciaron hace unos días, y cubrirán un total de 2.000 hectáreas de cultivos afectados. La medida refuerza la lucha contra el cotonet de Sudáfrica (Delettococcus aberiae) que afecta a cítricos de determinadas zonas de la Comunidad Valenciana.
El suministro se adjudicó a la empresa Koppert Biological Systems por un importe total de 300.300 euros.
El rasgo que hace especialmente recomendable y eficaz la apuesta por el depredador Cryptoleamus es su condición más generalista, respecto al Anagyrus, a la hora de atacar a los cotonets, ya que no sólo se alimenta del Delottococcus, sino también del resto de familias de cotonets existentes y que resultan dañinos para otras producciones vegetales como el caqui.
De este modo, la Consejería suma una nueva iniciativa al conjunto de acciones que está llevando a cabo contra el cotonet. La adquisición y dispersión del Cryptolaemus montrouzieri complementa y se une de manera muy significativa a los métodos de lucha biológica como la suelta del parasitoide Anagyrus aberiae, del cual los servicios técnicos de la Consejería han efectuado 255 sueltas a lo largo de 41 municipios distribuidos en 12 comarcas, o el reparto bonificado de trampas de feromonas.
Junto a la adquisición de este nuevo depredador, la Consejería de Agricultura acaba de aprobar también la declaración de utilidad pública en la lucha contra el cotonet en la que se incluyen toda una serie de acciones adicionales para potenciar así la eficacia del programa contra la plaga.
Entre las mismas destacan sobre todo las destinadas a la mejora de la bioseguridad e higiene con la desinfección de los distintos materiales y herramientas de uso agrario, así como el tratamiento excepcional a través de la materia activa metil-clorpirifos, de cuya aplicación se encargarán los propios técnicos de la Consejería.