Un nuevo informe del Instituto de Política Medioambiental Europea (IEEP) identifica los beneficios del biocontrol como una alternativa a los métodos de protección de plantas nocivos para el medio ambiente.
El efecto de los métodos de protección vegetal sobre la biodiversidad y la salud está ahora en el centro de las discusiones políticas y técnicas. Particularmente de cara a la próxima revisión de la Directiva de Uso Sostenible, un hito dentro de la implementación de los objetivos del Pacto Verde, es esencial explorar alternativas sostenibles.
Resultados clave
- Como insumo no químico y específico, el biocontrol reduce los riesgos de contaminación ambiental (suelo, agua, salud humana). Su aplicación, por lo tanto, apoya la mejora de la biodiversidad y la calidad del suelo al crear un estado favorable para las comunidades microbianas. Por lo tanto, Biocontrol puede ser un facilitador del Pacto Verde Europeo, en particular para los objetivos de la granja a la mesa.
- El uso de mecanismos naturales para el control de plagas y enfermedades acerca a los agricultores a comprender los ciclos de vida y el comportamiento de los insectos, al tiempo que crea un entorno no tóxico para los trabajadores agrícolas y los consumidores.
- La efectividad del biocontrol se puede ampliar en áreas de enfoque ecológico, como las franjas de flores. El despliegue de enemigos naturales en un marco de prácticas agrícolas sostenibles aumenta la tasa de éxito.
- La creciente demostración de la eficacia del biocontrol ha impulsado el mercado del biocontrol. No obstante, el desarrollo de un biocontrol económicamente competitivo requiere un proceso de registro adaptado, en lugar de seguir las reglas originalmente destinadas a los plaguicidas químicos. La ausencia de una definición legal clara de biocontrol y su importancia para el Manejo Integrado de Plagas (MIP) y la agricultura orgánica resalta la necesidad de un enfoque sistémico a nivel de la UE.
Faustine Bas-Defossez, directora de impacto externo en IEEP, dijo: “La ciencia es inequívoca sobre la necesidad de avanzar rápidamente hacia un sistema alimentario y agrícola sostenible para permanecer dentro de los límites planetarios. El Pacto Verde Europeo, en particular sus estrategias de la granja a la mesa y la biodiversidad, tienen como objetivo establecer el camino hacia ese nuevo sistema de producción y consumo de alimentos. Como alternativa sistémica y equilibrada a los insumos químicos en la agricultura, el biocontrol es sin duda un facilitador de ese cambio de sistema.
Como Think Tank independiente que lucha por la sostenibilidad y la formulación de políticas basadas en la ciencia, nos sentimos muy entusiasmados cuando IBMA se acercó a nosotros para realizar una revisión de la literatura sobre los beneficios del biocontrol para el medio ambiente y sus impactos económicos, climáticos y de gobernanza más amplios. De hecho, creemos que dicha evidencia es necesaria para tomar decisiones fundamentadas y sólidas sobre la implementación de los objetivos del Pacto Verde Europeo ".
Las cinco recomendaciones principales de políticas:
- Definición: El uso de una definición común de la UE sobre control biológico aportaría claridad de sus aspectos técnicos al debate político sobre el control de plagas para la agricultura sostenible.
- Marco legal: Debe considerarse la posibilidad de adaptar el marco legal actual de la UE para reconocer las implicaciones no tóxicas del biocontrol, en comparación con los productos químicos.
- Oportunidades de alineación: al aumentar la aceptación del uso del biocontrol, como parte del MIP, la PAC se puede alinear mejor con los ODS y la estrategia de la granja a la mesa, al crear un camino para lograr las metas de 2030 sobre agricultura orgánica y reducción de los pesticidas químicos.
- Necesidades de investigación: extender los temas de investigación y la inversión más allá de las cuestiones técnicas a la relación del biocontrol con la mitigación del cambio climático y la economía agrícola creará una imagen más holística del impacto del uso del biocontrol.
- Aplicación de campo: presionar por una aplicación a mayor escala y acelerada, respaldada por los instrumentos de política disponibles en la Política Agrícola Común, mostrará el potencial que demuestra el biocontrol para controlar las plagas y enfermedades de las plantas, en apoyo de los objetivos del Pacto Verde de la UE.
Jennifer Lewis, directora ejecutiva de IBMA dijo: “IBMA está encantada de que el IEEP haya podido realizar este trabajo, que muestra los amplios beneficios de sostenibilidad del biocontrol, destacando que el biocontrol es mucho más que una simple alternativa a los pesticidas. El biocontrol mantiene y mejora la biodiversidad y la salud del suelo contribuyendo a una agricultura resiliente que es tan importante para contrarrestar el cambio climático.
La Asociación Internacional de Fabricantes de Biocontrol (IBMA) encargó al IEEP que revisara los beneficios del control biológico de plagas para la naturaleza, la alimentación, la salud y el clima. Jean-François Hulot, asociado del IEEP, y Nora Hiller, analista de políticas, fueron coautores del informe.