La Ministra de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento de Brasil, Tereza Cristina, ha firmado, junto con otros 24 países de América Latina y el Caribe, una declaración como medida para garantizar el suministro de alimentos a los 620 millones de consumidores que viven en esta región.
En el documento, los ministros, secretarios de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Desarrollo Rural de estos países se comprometen a desarrollar acciones para apoyar el funcionamiento regular del sistema alimentario durante la crisis COVID-19.
Señalan que las existencias mundiales de los principales productos alimenticios están en aumento y las cosechas en los principales países productores han sido buenas. "Dieciocho millones de agricultores, pescadores, agricultores, acuicultores, hombres y mujeres, continúan trabajando diariamente en nuestra región para que no nos falte comida en nuestras mesas". mercados mayoristas y minoristas ”.
En este escenario, los representantes de esos países recuerdan que, a diferencia de las crisis anteriores, el suministro de alimentos se mantuvo estable en el mundo y en la región. "Sin embargo, no hay razones para justificar aumentos significativos en los precios de los alimentos, por eso pedimos a todos los actores del sistema alimentario que eviten la especulación en este momento de emergencia".
El grupo de estos países declara que trabajará de manera coordinada para proporcionar "asistencia técnica y financiera a pequeños y medianos productores agrícolas, pesqueros, pastores, agricultores y pequeñas y medianas agroindustrias, que proporcionan una alta proporción de alimentos básicos para el consumo nacional".
Otra línea de acción conjunta será desarrollar acciones, en asociación con importadores y distribuidores de alimentos en el sector privado, que aseguren la operación regular de los mercados mayoristas locales, regionales y nacionales y permitan el acceso de productos y trabajadores a los locales.
El monitoreo de las cadenas logísticas, especialmente aquellas que incluyen uno o más países, todavía está planeado; estimulando el uso de plataformas y aplicaciones de comercio electrónico, además de "garantizar que las políticas fiscales y comerciales, definidas por los gobiernos como parte de su respuesta al impacto económico de la crisis, no socaven el funcionamiento normal del comercio regional y mundial de alimentos".
La declaración cuenta con el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y otros organismos multilaterales especializados, como el Programa Mundial de Alimentos (PMA); el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA; la Organización Mundial de Sanidad Animal) (OIE); el Instituto de Investigación y Desarrollo del Caribe (CARDI); la Agencia de Salud Agrícola y Seguridad Alimentaria del Caribe (CAHFSA) y la Agencia Regional Internacional para la Salud Agrícola (OIRSA).