La imagen, convertida ya en todo un símbolo, de los tractores desinfectando las calles contra el Covid-19 va desapareciendo en los pueblos valencianos a medida que avanza la desescalada y, desde hoy, con el pase a la fase 1 de toda la Comunidad Valenciana. La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) estima que cerca de un millar de agricultores están ultimando su colaboración, de manera voluntaria y altruista, en estas labores de desinfección para mantener lo más limpias y seguras posibles del virus las calles de más de un centenar de municipios de todas las comarcas valencianas.
Esta campaña solidaria del sector agrario ha contado con la coordinación de los ayuntamientos, a través de los consejos agrarios locales, con AVA-ASAJA, otras organizaciones profesionales agrarias, cooperativas, comunidades de regantes y todas aquellas entidades del campo que han prestado su ayuda desinteresada en los momentos más críticos de la expansión del Covid-19. A nivel nacional, la organización ASAJA ha aplicado esta iniciativa en buena parte de las comunidades autónomas.
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, afirma que “los agricultores estamos mostrando nuestro lado más solidario en esta emergencia sanitaria. Además de seguir al pie del cañón para garantizar el suministro de alimentos, no hemos dudado en echar una mano a la hora de prevenir la pandemia y colaborar en donaciones a las familias más vulnerables. Hemos pasado de manifestarnos por la baja rentabilidad a sacar nuestros tractores para ayudar a la sociedad y ese compromiso debería conllevar precios dignos y un reconocimiento social”.
En la mayor parte de las localidades valencianas, el sector agrario ya ha dejado de acometer las tareas de desinfección para evitar molestias a los ciudadanos durante sus paseos al atardecer. En muchos de esos casos los consistorios han reemplazado la colaboración de los agricultores por servicios municipales o a cargo de empresas privadas que efectúan una desinfección de modo más localizado. Por su parte, aquellos municipios que aún mantienen las labores del colectivo agrario han decidido retrasar el horario de las mismas a partir de las 23 horas.
Aguado destaca “las muestras de agradecimiento que la ciudadanía nos ha trasladado. Ahora que la situación del virus parece más controlada, que la gente sale más de sus casas y que en el campo se acumulan las labores agrarias propias de esta época del año, creemos lógico aparcar nuestra colaboración. Tenemos las máquinas de aplicación, los equipos de protección individual (EPIs), la formación necesaria para acometer estas tareas de manera segura. Y queremos que sepan todos que estaremos ahí cuando haga falta”.