El estrés por sequía afecta a las plantas antes de lo esperado, según Tradecorp
La compañía de nutrición y sanidad vegetal, en colaboración con Landlab, ha elaborado un vídeo timelapse con cámara infrarroja que demuestra cómo afecta la falta de agua a a las plantas.
RiegoEspaña - 21/05/2020
Comparativa con tres conjuntos de plantas con los que se ha hecho el timelapse de Tradecorp.
Es un error habitual pensar que el efecto más común de la sequía en las plantas es el marchitamiento… pero en realidad, no es así. De hecho, el marchitamiento de las plantas es uno de los signos visibles finales del estrés por sequía y una planta en este estado se encuentra al borde de su muerte celular.
¿Cómo reaccionan las plantas al estrés por sequía?
Las plantas y los humanos tienen reacciones muy similares a la deshidratación. Alteramos nuestro metabolismo para conservar la humedad. En las plantas, los estomas se cierran herméticamente para evitar la pérdida de agua durante la transpiración, mientras que en los humanos se reduce la sudoración.
A medida que el agua comienza a escasear, la planta o el cuerpo comienzan a implementar más procedimientos de emergencia para conservar los fluidos. En este momento, las células pasan a sufrir un estrés interno que se denomina estrés abiótico.
Estrés abiótico: Al estrés que es externo a la planta cuyo origen no es patógeno ni biológico se le denomina estrés no vivo o estrés abiótico.
Debido al calor generado por el propio metabolismo de la célula y la falta de transpiración, la temperatura en las células comienza a aumentar, como se puede ver en el video timelapse. En esta etapa de sequía, la planta no se marchita visiblemente, pero ya está sufriendo grandes un gran nivel de estrés que, por ejemplo, reduce la tasa de crecimiento.
¿Cuáles son los efectos del estrés por sequía en las plantas?
Estos efectos incluyen:
reducción de la capacidad de la célula para la realización de sus funciones normales y para su crecimiento e,
interrupción de la producción de aminoácidos o proteínas.
destrucción de compuestos químicos que son críticos para la normal función celular, pero que son sensibles al calor.
concentración de electrolitos o sales (osmolitos) en la célula, que pueden dañar las mitocondrias, la fábrica energética de la célula.
A medida que continúa la sequía, las células pierden agua porque:
Se vuelven permeables y el agua escapa a través de la pared celular
Además, el agua de la célula se utiliza para preservar funciones críticas
Como resultado, las células se vuelven blandas o pierden su «turgencia» y solo en esta etapa tardía se hace visible el marchitamiento.
Incluso si se proporciona agua en esta etapa, aunque la célula pueda rehidratarse y recuperar la «turgencia», las funciones celulares pueden estar dañadas permanentemente y, como consecuencia, nunca más podrán alcanzar el 100% de su funcionalidad. En las plantas, esto da como resultado una reducción del rendimiento y de la calidad de la cosecha.
Timelapse con infrarrojos para ver el estrés abiótico «invisible» causado por la sequía
Tradecorp, en colaboración con Landlab, un importante centro de investigación agrícola italiano, ha creado un nuevo timelapse con cámaras infrarrojas para demostrar que los efectos invisibles de la sequía, como el aumento de la temperatura celular o la reducción de la tasa de crecimiento, ocurren incluso antes de que pueda llegar a verse el marchitamiento de la planta.
Para ver estos efectos, observamos tres conjuntos de plantas:
La cámara infrarroja demuestra claramente que antes de que se produzca el marchitamiento, las plantas ya sufrían estrés abiótico.
La temperatura de la hoja de la planta sin tratar sometida a sequía fue la más alta.
La tasa de crecimiento de la planta sometida a sequía sin tratar fue menor que las plantas protegidas con Primactive y las plantas que no sufren estrés por sequía.
El marchitamiento se pudo apreciar primero en la planta afectada por sequía sin tratar, y se retrasó en las que se protegió con Primactive.
El Efecto Primactive puede retrasar o incluso eliminar el estrés abiótico al que están expuestos los cultivos durante su ciclo normal del cultivo. En este ejemplo, el estrés por sequía. La temperatura de la superficie de la hoja se redujo en comparación con las plantas no tratadas y también se retrasó el inicio del marchitamiento.
Como resultado, las plantas tratadas con Primactive sufrieron menos alteraciones y daños en sus funciones metabólicas y su tasa de crecimiento fue mucho mayor que en las plantas sin tratar. La reducción de los efectos negativos de la sequía ayuda a proteger el rendimiento y la calidad de los cultivos y, por lo tanto, la rentabilidad. Todo gracias a Primactive.
La colaboración de Tradecorp con Landlab y otros centros de investigación
Tradecorp y Landlab tienen una larga historia de colaboración e investigación juntos. Este video timelapse con cámara infrarroja es solo un ejemplo de los muchos proyectos de éxito en los que el departamento de I+D de Tradecorp y Landlab han estado colaborando. Tradecorp ha utilizado la experiencia adquirida con Landab y otros centros de investigación para alcanzar una comprensión profunda sobre los bioestimulantes y su uso óptimo en la agricultura, que la han convertido en un referente a nivel internacional.