El primer ministro francés, Manuel Valls, ha anunciado un paquete de medidas de apoyo a la agricultura francesa, que en su mayoría se destinarán a los ganaderos, y que incluye también actuaciones de las que se beneficiarán todos los sectores agrarios centradas principalmente en el aligeramiento de las cargas sociales y fiscales.
Entre las medidas anunciadas, el primer ministro destacó la necesidad de reducir las cargas que soportan los agricultores y anunció para este año una reducción de la cotización mínima por enfermedad para los autónomos que permitirá bajar alrededor de 50 millones de euros las cotizaciones sociales. Propuso también analizar nuevas medidas sobre fiscalidad agraria que tengan en cuenta la volatilidad de los precios y que favorezca la instalación de jóvenes agricultores.
Manuel Valls se refirió también a las negociaciones comerciales de la Comisión Europea con terceros países destacando que “en lo que se refiere a las negociaciones sobre los acuerdos de libre cambio, Europa debe defender sus intereses agrícolas, promover sus oportunidades y evitar toda desestabilización de los mercados”.
En su discurso el primer ministro resaltó la importancia de la agricultura para Francia y para su economía. Destacó que “la agricultura es nuestro patrimonio, la identidad de nuestros territorios. Y es más que eso. Es también nuestro futuro, pues es un importante activo de nuestra economía para el equilibrio de nuestra balanza comercial”.
El paquete de medidas da respuesta al fuerte descontento existente en el sector agrario francés que se ha manifestado en los últimos mes con cortes de carreteras, destrucción de mercancías de camiones de otros Estados miembros y en última instancia una manifestación de agricultores y tractores que tuvo lugar la semana pasada en las afueras de Paris, el jueves 3 de septiembre, el mismo día en que el primer ministro anunció el nuevo paquete de medidas.