El precio de la fresa española en los mercados europeos ha caído en las últimas semanas en torno a un 50 por ciento debido principalmente al detraimiento del consumo y a la entrada de producciones de otros países como Francia, Alemania e Italia.
El presidente de la Asociación de Productores y Exportadores de la Fresa de Huelva (Freshuelva), Alberto Garrocho, ha indicado que ''la situación es bastante complicada'' hasta el punto de que los agricultores destinan parte de la fresa recogida para fresco a industria, al objeto de levantar un poco la temporada en términos económicos.
A este desplome de precios, ha explicado, ha contribuido el descenso del consumo, punto en el que ha reconocido que ha podido influir en el hecho de que en semanas pasadas la fruta recolectada ''tenía poco sabor'' y la entrada de otras producciones en los mercados como las procedentes de Francia, Italia o Alemania.
Pese a esta situación, Garrocho ha manifestado que se espera un repunte del consumo, ya que la fruta ha recuperado sus cualidades, y que ''a la vuelta de una semana comiencen a subir los precios para sacar algo de rentabilidad ya que en estos últimos días apenas si se han podido cubrir los costes de producción''.
En estos momentos la fase de recolección de la campaña de la fresa se encuentra entre un 55 y un 60 por ciento y se prevé que se extienda hasta finales de mayo.
El 94 por ciento de la producción de la fresa española se concentra en la provincia de Huelva, representando además el 94 por ciento del total nacional y el 33 por ciento del total europeo.
En la actualidad, Huelva cuenta con una superficie de cultivo de fresa de 6.400 hectáreas y la estimación de la producción de este campaña es de 240.000 toneladas.
