La Comisión Europea ha elevado de 150 a 210 millones su propuesta para compensar a los productores hortofrutícolas afectados por la crisis sanitaria derivada de la E. coli extendiendose a calabacín y pimiento.
El comisario de Agricultura, Dacian Ciolos, presentó una propuesta mejorada sobre la realizada el martes para calmar los ánimos de agricultores y comercializadores. Ahora ofrece 210 millones de euros para cubrir con ayudas comunitarias el 50% de las pérdidas (el martes era el 30%) que los agricultores europeos, sobre todo españoles, han sufrido como consecuencia de la alarma creada por Alemania al señalar erróneamente unas partidas de pepinos procedentes de España como el origen del brote letal de la bacteria E. coli en el norte de Europa.
La nueva propuesta de Bruselas, amplía de tres a cinco la lista de hortalizas cubiertas por estas ayudas, al sumar los calabacines y los pimientos a pepinos, tomates y lechugas como productos perjudicados por el temor de los consumidores y la caída de las ventas. Podrán optar a este apoyo tanto los agricultores adscritos a alguna organización agraria como los independientes que hayan sufrido o sufran pérdidas desde el 26 de mayo hasta el 30 de junio.
Ciolos propuso el martes crear un fondo de 150 millones con el objetivo de cubrir con dinero comunitario el 30% de las pérdidas de los agricultores afectados por la caída de las ventas a raíz de esta crisis, es decir, de los productores de pepino, tomate y lechuga. Sin embargo, tras escuchar el rechazo de los ministros de Agricultura de la UE, el comisario se comprometió a ''revisar al alza'' su oferta. Nueve delegaciones, entre ellas España, Francia y Alemania, consideraron entonces ''insuficiente'' los 150 millones y exigieron compensaciones por valor del 100% de la mercancía tirada. El montante final de la ayuda tendrá que ser debatido y votado por los 27. El sindicato agrícola COAG cree insuficiente el nuevo techo.
Mientras tanto, el Gobierno alemán se aferró a la consigna de que la salud es prioritaria frente a los intereses económicos y defendió su gestión ante la crisis sanitaria, que ha causado ya 25 muertos en el país y daños multimillonarios al sector agrícola. Alemania mantiene la alerta y la recomendación de no comer pepinos, lechugas ni tomates crudos ni tampoco semillas germinadas, puesto que no se ha fijado aún el origen de la infección.
Comisario de Agricultura, Dacian Ciolos
