Ante la anunciada autorización del uso de alimentos transgénicos advierte que conociendo el desorden y falta de control habría que preguntarse si realmente se podrá asegurar que no se autorizen indiscriminadamente.
Ante la anunciada autorización del uso de alimentos transgénicos en el país, advierte que -conociendo el desorden y falta de control en nuestro país- habría que preguntarse si realmente se podrá asegurar que las semillas genéticamente modificadas no se autorizen indiscriminadamente.
Es de esperar que aquí al menos se adopten similares medidas a las que exige el mercado internacional, que obliga a las empresas a indicar en sus etiquetas si se trata de productos transgénicos.
Por otro lado, hay que indicar que el cultivo de este tipo de alimentos nos enfeudará definitivamente al mercado norteamericano, ya que los países europeos no aceptan el ingreso de estos productos y de semillas genéticamente modificadas al espacio de la UE.
Es decir que la potencial ganancia de un mercado significará la inmediata pérdida de otro. Y, por cierto, los riesgos contra la biodiversidad que hemos consignado