EEUU 17/01/2007
San Diego.- Pérdidas preliminares estimadas en unos mil 100 millones de dólares y el disparo en el precio de algunos productos al doble de su valor en el mercado, es el saldo que cobró una onda gélida que azotó California en los últimos cuatro días.
El secretario estatal de Agricultura, A.G. Kawamura, declaró que “en este momento evaluamos el daño, pero es claro que superó al que causó la helada de 1998″, que destruyó cosechas valuadas en unos 700 mil millones de dólares.
Entre el 70 y 75 por ciento de los cítricos estaba todavía por cosecharse cuando la ola de frío llegó a estacionarse con periodos de menos de cero grados centígrados a partir del viernes pasado.
La cosecha de cítricos de California están valoradas en unos mil 300 millones de dólares, de acuerdo con la actividad del sector para la cosecha 2005-2006.
Pero “la pérdida cítrica de esta semana impactará hasta la cosecha del periodo 2007-2008″, aseguró el principal agroindustrial de cítricos en el Valle Imperial de California, Mark McBroom, de la corporación Sep.
De acuerdo con McBroom, “esta helada destruyó el florecimiento que nacía e iba a convertirse en fruto a finales del próximo otoño”.
Además de las pérdidas directas de la cosecha en árboles en pie, los agroindustriales invirtieron en menos de 100 horas más de 85 millones de dólares en operaciones y suministros para intentar mitigar el impacto del frío.
Muchos agroindustriales ordenaron combatir con fogatas reguladas las cosechas en los valles de San Joaquín, Sacramento, Coachella, Imperial y Central.
Como repercusión inmediata, las cajas de cítricos que el jueves pasado se vendían en una central estatal en Visalia, cerca de Fresno, entre 14 y 15 dólares por unidad, este martes alcanzaron precios de entre 28 y 32 dólares.
El frío destruyó parcialmente también cosechas de lechuga orejona y romana. En El Centro y San Bernardino algunos industriales reportaron que las empacadoras tendrán que eliminar hojas exteriores y asegurarse de que el resto tenga calidad.
Entre los condados de San Diego y Riverside, donde se produce el 95 por ciento de todo el aguacate estadunidense, sólo se había cosechado el 5.0 por ciento, el resto permanecía en pie y la Comisión del Aguacate de California estimó daños por 350 millones de dólares.
Otras cosechas, en las que sólo más adelante se podrá estimar el impacto de la helada, son el brócoli, en temporada de cosecha este mes, y el durazno, que como los cítricos comenzaba a florecer para dar frutos en la primavera.
California permanece en estado de emergencia por orden del gobernador Arnold Schwarzenegger con una treintena de cuarteles de la Guardia Nacional y otros 16 centros, como auditorios adaptados como potenciales refugios de población sin hogar o sin calefacción.
Hasta este martes el estado carecía de reportes sobre pérdidas de vidas humanas por el frío.