ESPAÑA 18/08/2006
Se está estudiando, ha indicado el Director General, junto con las Organizaciones Agrarias, los modelos de contribución del MAPA a la agroenergía y los elementos de promoción de este tipo de cultivos
El Director General de Desarrollo Rural del MAPA, Francisco Amarillo, ha intervenido en los cursos de verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en Santander, como moderador de las mesas redondas organizadas en torno a dos temas de gran actualidad, como son la biomasa, y el Plan de Acción de la Unión Europea, y por otra parte los biocarburantes, la Directiva europea, y los cultivos energéticos.
Durante la presentación de las mesas, Francisco Amarillo ha resaltado la importancia de los cultivos agroenergéticos para el sector agrario, señalando que con ellos se abarcaría una gran franja de superficie y zonas geográficas, en las que se podrían ubicar factorías para la producción de aceite de colza.
Si bien, ha apuntando el Director General, para el biodiesel, los cultivos energéticos necesarios serían la colza y otra oleaginosa tipo girasol, para el bioetanol, los tipos de cultivos serían más variados, incluyendo por una parte los cereales como el trigo, la cebada o el maíz, y por otra la remolacha.
Estos cultivos, ha recordado Francisco Amarillo, serían necesarios para la producción de 750.000 tep (toneladas equivalentes de petróleo) de bioetanol, objetivo recogido en el Plan de Energías Renovables 2005 - 2010, en el que también se prevé la producción de 1.221.800 tep de biodiésel.
En este sentido el Director General ha indicado que las perspectivas de futuro son bastante halagüeñas, ya que si bien mediante una Directiva comunitaria se fijaba el horizonte de 2010 para lograr un 5,75 de la mezcla de biocarburantes en el consumo de energía, la tendencia actual de la Unión Europea es adelantar los calendarios, de forma que lo que estaba previsto para 2010 es posible que se consiga en 2008.
Estas favorables perspectivas también se dan en España donde, ha explicado Francisco Amarillo, los proyectos preparados o ya en marcha, para la producción de biocarburantes, superan con mucho las previsiones del Plan de Energías Renovables 2010, con una capacidad de producción de biodiesel que, incluidos los proyectos, aumenta rápidamente, estando ya muy cercana a los cinco millones de toneladas, frente a los 1.200.000 tep necesarios para cumplir el objetivo del 5,75 por ciento para 2010.
Tras explicar que en la actualidad se está estudiando, junto con las Organizaciones Profesionales Agrarias, los modelos de contribución del MAPA a la agroenergía y los elementos de promoción de estos cultivos agroenergéticos, el Director General ha instado al movimiento cooperativo y a las OPAs a participar, no sólo en la producción, sino en el ciclo completo, incluida la distribución.
Francisco Amarillo ha destacado igualmente en su intervención la importancia de los cultivos agroenergéticos y la producción de biocombustibles por su aportación a la absorción de CO2, y por tanto en la rebaja de los gases de efecto invernadero en el transporte señalado en el Protocolo de Kyoto, por lo que adquieren, ha añadido, un gran valor económico dada su contribución medioambiental.