OCM del vino: ASAJA rechaza de plano la propuesta de la Comisión y exige una ayuda a la hectárea para el viticultor

ASAJA sigue presionando a las Administraciones para que se opongan frontalmente a la propuesta de la Comisión para reformar la OCM del vino. Esta organización asiste continuamente a reuniones en Bruselas para defender los intereses de los viticultores españoles, que pasan, necesariamente, por la aprobación de una ayuda a la hectárea en la nueva OCM y contra la política de arranques generalizados y masivos, que deben sustituirse por programas controlados de arranques ligados a la jubilación.

POSICIÓN DE ASAJA

La sectorial vitivinícola de ASAJA, reunida en Madrid en la sede de la organización, tras analizar en profundidad el documento de reforma de la Organización Común de Mercado (OCM) del vino presentada por la Comisaria de Agricultura, Marian Fischer-Boël, rechaza categóricamente la propuesta porque supone el desmantelamiento de la viticultura europea y en especial de la española. La sectorial llego a las siguientes conclusiones:

1. La futura reforma de la OCM vitivinícola debe de asegurar para España el mismo presupuesto que actualmente viene percibiendo de la UE (37,3% del presupuesto total), igual que ha sucedido en los otros sectores que se han reformado recientemente.
2. La renta del productor debe ser el principal objetivo a defender y se deben otorgar los incentivos necesarios para ajustar la producción a la demanda del mercado. Para garantizar esto, la nueva OCM debería de establecer un sistema ayuda a la hectárea tendente a mantener los ingresos de los productores compatibles con medidas tendentes a incrementar la competitividad de los vinos europeos.
3. Se debe de instaurar un programa de arranque limitado, ligado a la jubilación..
4. ASAJA apuesta porque la nueva OCM promueva un control efectivo de la superficie vitícola, el mantenimiento de la prohibición de nuevas plantaciones dado que el potencial comunitario es ampliamente suficiente.

La Comisaria de agricultura de la UE, Mariann Fisher Bool, presentó el pasado 22 de junio una Comunicación oficial para reformar el sector del vino de la UE. El Comunicado no es una propuesta definitiva sino un documento de discusión y debate. Lo más lógico es que la propuesta definitiva se presente en diciembre ó enero, se apruebe en el 2007 y entre en vigor en el año 2008.

El comunicado es un documento no legislativo de la Comisión donde se barajan diferentes opciones de reforma y se abre un debate que continuará hasta la presentación de las propuestas legislativas en diciembre o enero de este año.

De los cuatros escenarios posibles que la comisión barajaba (1.- Status quo, 2.-Reforma en profundidad, 3.- Introducción de pago único y 4.-liberalización total), la comunicación de la Comisión desarrolla el escenario numero dos del documento y deja de lado los otros tres escenarios.

Los puntos principales de la propuesta de reforma son los siguientes:

· El pilar fundamental de la propuesta es la creación de un ambicioso Plan de arranque. La Comisión habla del objetivo de arrancar 400.000 hectáreas en la UE durante un período de 5 años con un montante máximo de la ayuda de 2.400 millones de euros.. El Plan de arranque no estaría sometido a restricciones por parte de los Estados miembros y los productores tendrían plena libertad para elegir si arrancar o no el viñedo. La prima se reducirá anualmente a fin de fomentar la adhesión al régimen desde el primer año.
· Eliminación de las medidas de gestión de mercado como las prestaciones vinicas, destilación de alcohol de uso de boca, almacenamiento privado, ayuda al mosto.....). También se suprimirá la destilación de crisis y será sustituida por una red de seguridad alternativa que recurrirá a la dotación financiera nacional.
· Se plantea un régimen de restricción de los derechos de plantación que expirarán el 1 de agosto de 2010, o se suprimirá de inmediato. El régimen de arranque se suprimirá también al mismo tiempo. Cada hectárea de viñedos arrancados por cuenta del agricultor pasará a formar parte de la superficie que puede optar al régimen de pago único.
· Sobres nacionales. El comunicado de la Comisión propone la creación de un presupuesto asignado a cada Estados miembro productores de vino (sobre nacional) y se calcularía de acuerdo a criterios objetivos, aun no definidos. El citado sobre se podría utilizar para medidas como; seguro ante crisis naturales, cosecha en verde, sistema de reestructuración y reconversión.
· También se propone un traspaso de fondos a Desarrollo Rural . Los fondos serán transferidos al desarrollo rural y destinados a medidas específicas del sector del vino, tales como un plan de jubilación anticipada de 18.000 euros al año y programas agroambientales En el caso de medidas agroambientales para mantener el viñedo y el paisaje el montante máximo sería de 900 euros hectárea para un período entre 5 y 7 años.
· Política de calidad. Se establecen dos clases de vinos: una formada por vinos con indicación geográfica y otra sin ella. Se establecerán nuevas normas relativas al etiquetado a fin de ayudar al consumidor y facilitar la tarea de los productores a la hora de competir. Se autorizará también el uso de indicaciones que no están permitidas por las normas actualmente vigentes, como la variedad de uva y la cosecha en el caso de los vinos sin indicación geográfica.
· Se transfiere a la Comisión la responsabilidad de aprobar nuevas prácticas de vinificación. Se reconocerán las prácticas de vinificación aceptadas por la OIV.