Para la Federació de Cooperatives Agràries de Catalunya (FCAC), la última propuesta del Gobierno catalán para la ampliación de Red Natura 2000 no permite valorar los inconvenientes derivados de la inclusión de superficies en el proyecto. Por tanto y en la medida que evita cualquier tipo de concreción, la FCAC ha solicitado que se paralice hasta que se definan, para cada zona, los planes de uso y gestión y las compensaciones económicas a los propietarios.
La FCAC tiene previsto presentar, durante esta semana, un documento de alegaciones en el que denuncia que la propuesta no recoge, ni siquiera menciona, cual será el contenido de los planes de gestión que regirían en las superficies propuestas a acogerse a la Red Natura 2000 así como tampoco una regulación específica para la financiación del régimen de protección que pretende implantarse. El proyecto genera incertidumbre y desconfianza en cooperativas y productores y es totalmente necesario que se concreten a corto plazo qué actividades se podrán llevar a cabo y cuáles no en las zonas afectadas, el presupuesto que se destinará a paliar los perjuicios derivados de dichas limitaciones y su procedencia. En ningún caso las compensaciones deben proceder de fondos agrarios ni de fondos destinados a desarrollo rural.
Al mismo tiempo, no se reconoce que la actividad agraria a menudo forma parte -de forma irrenunciable- de los ecosistemas a proteger y que los agricultores han sido actores destacados de su conservación. En este sentido, no se garantiza la continuidad de las actividades tradicionales que hasta ahora se habían llevado a cabo respetuosamente con los valores naturales. En la práctica, la propuesta puede ser un perjuicio para la economía agraria en general y para las cooperativas en particular.
La Federació de Cooperatives reclama, en definitiva, que las medidas que se adopten tengan en cuenta las exigencias económicas, sociales y culturales de las diferentes regiones y que se retiren de la propuesta los espacios de coincidencia con la previsión de nuevas infraestructuras de regadío y las zonas terrestres del delta del Ebro ocupadas actualmente por arrozales.
