ESPAÑA 12/04/2006
La organización agraria considera que, con estas declaraciones, está haciendo un flaco favor al sector de cara a la negociación este año de la reforma de la OCM de Frutas y Hortalizas, vital para los productores almerienses
COAG Almería ha mostrado su malestar por las declaraciones efectuadas ayer por la ministra de Agricultura, Elena Espinosa, en las que insinuaba que la crisis de precios que afecta al sector no se debe a abusos en los márgenes comerciales establecidos por los grandes grupos de distribución europeos, cuestionando lo que COAG lleva denunciando en los últimos años.
A juicio de la organización agraria, la ministra se equivoca al menospreciar la opinión del sector, fundamentada precisamente en cifras que maneja su propio Ministerio año tras año. “No es razonable o justificable de ningún modo que exista una diferencia, superior en ocasiones al 1.000%, en algunas hortalizas entre el precio que percibe el agricultor y el que paga el consumidor por esos mismos productos”, afirma el secretario provincial de COAG, Andrés Góngora.
Desde COAG consideran que las campañas de sensibilización que ha emprendido el sindicato en los últimos meses para intentar concienciar a los consumidores, el otro eslabón de la cadena alimentaria que soporta unos márgenes comerciales desorbitados, están empezando a surtir efecto. El Ministerio se está viendo sometido a fuertes presiones por parte de los grandes grupos de distribución, que por primera vez ven amenazada su posición dominante en el mercado y, con ello, peligrar sus beneficios, obtenidos a costa del trabajo de los agricultores. “Este tipo de reacciones indican que el camino emprendido por nuestra organización es el correcto. Si agricultores y consumidores continuamos unidos en nuestras reivindicaciones lograremos un comercio justo”, advierte el máximo responsable provincial de COAG.
Por otra parte, desde COAG critican que la persona que dirigirá los designios de España en la inminente reforma de la OCM de Frutas y Hortalizas realice este tipo de declaraciones justo en mitad de la negociación más importante de los últimos años y que marcará en gran medida el futuro del sector. “Flaco favor nos está haciendo”, se lamenta Góngora.
Espinosa incurre además en una contradicción cuando niega, por un lado, que existan problemas en el sector y, por otro, afirma que la crisis se debe a los “exagerados costes de logística”. Estos “costes” no son otra cosa que parte de los márgenes comerciales de los que habla COAG Almería y que, en la mayoría de los casos, son impuestos por empresas propiedad de las grandes cadenas de distribución.
En Almería, esta situación dejó hace tiempo de ser coyuntural –es decir, limitada a momentos puntuales de la campaña en los que los precios de las frutas y hortalizas bajaban– para convertirse en una crisis estructural que se ha ido forjando con el paso de los años y que afecta a día de hoy a la propia estructura del sistema de comercialización, un problema agravado además por un aumento exponencial de los costes de producción que soportan íntegramente los agricultores.