Cerdá destaca que la agricultura no puede asumir el alto coste del agua desalada
El consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, ha destacado esta mañana en el VII Congreso de COEC que la agricultura de la Región de Murcia no puede asumir el alto coste del agua desalada y ...
El consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, ha destacado esta mañana en el VII Congreso de COEC que la agricultura de la Región de Murcia no puede asumir el alto coste del agua desalada y que cifrar todas las esperanzas de futuro en esta agua supone condenarla a su desaparición.
El consejero intervino al final de una mesa redonda sobre “Recursos hídricos y energéticos” para señalar que Murcia es una Región próspera que en los últimos años ha experimentado un gran crecimiento, superior a la media nacional, pero para seguir progresando dependemos principalmente de un recurso clave: el agua, “sobre todo el sector agrario, que consume el 80 % de este recurso tan vital”. Cerdá destacó la importancia del sector agroalimentario de la Región señalando, entre otras cosas, que el 20 % de las hortalizas que exporta España proceden de Murcia.
El consejero aseguró que la Región de Murcia está haciendo los deberes en materia de depuración, “vamos en los puestos de cabeza de España en los programas de depuración y reutilización de aguas, lo que se traduce en 46 grandes depuradoras, con una capacidad total de tratamiento de 500.000 m3/día”. Asimismo añadió que “la Región de Murcia depura 107 Hm3 de aguas residuales al año, que suponen el 25 % de las aguas que se reutilizan en toda España. Además somos los primeros en calidad de agua depurada”.
Cerdá se refirió también a la modernización de regadíos señalando que mientras que la media de España se sitúa en el 8 %, en la Región se ha alcanzado ya el 70 % .
Respecto del trasvase del Ebro, el consejero señaló que el Gobierno socialista no tenía argumentos técnicos, económicos ni medioambientales para derogarlo y que la naturaleza se ha encargado de demostrar las falsedades que se dijeron en su momento al afirmar que en años de sequía no se podría trasvasar agua, “ahora que padecemos una de las peores sequías registradas en los últimos 50 años, el Ebro arroja al mar ingentes cantidades de agua que nadie aprovecha”.
Respecto del trasvase del Tajo dijo que le parecía injusto hablar de un próximo trasvase cero, “cuando las reservas de los embalses de Entrepeñas y Buendía están por encima de los 300 hectómetros, a los que habría que sumar las aportaciones que se producirán cuando se derritan las últimas nieves”.
Cerdá concluyó que no tiene sentido hablar de blindar ríos en los estatutos de autonomía, “el agua es de todos los españoles y el Gobierno central debería velar por que se comparta este recurso racionalmente y hacer que vaya desde donde sobra hasta donde falta”.