ESPAÑA 22/03/2006
Durante el encuentro mantenido en la mañana de hoy en Bruselas con Mariann Fischer, Comisaria de Agricultura europea, para avanzar en la posibles líneas de la reforma de la OCM del Vino, Manuel Sánchez-Brunete, Responsable de Vino de COAG y Presidente del Comité Consultivo Vino de la UE, ha mostrado su rotunda oposición a la introducción del pago único por explotación, (desacoplamiento de las ayudas), en el sector vitivinícola europeo.
Durante la reunión ha quedado claro que el sector quiere excluir a la vid de las líneas generales que está marcando la Política Agraria Común (PAC) a las diferentes reformas, con ayudas desvinculadas de la producción y la introducción del pago único por explotación. “La instauración de un régimen de apoyo a la superficie no es la solución a los problemas de las pequeñas y medianas explotaciones en las que desarrollan su actividad los agricultores profesionales. Los grandes productores que tienen sus marcas ya han accedido al mercado por lo que no necesitan ayudas de este tipo, mientras que para las explotaciones de difícil viabilidad económica una ayuda a la hectárea tampoco será garantía de su mantenimiento y desembocaría en una liberalización de plantaciones. En este sentido, rechazamos la liberalización total de plantaciones, puesto que acrecentaría aún más el desequilibrio entre la oferta y el consumo”, ha apuntado Sánchez-Brunete.
El responsable de Vino de COAG también ha trasladado a la máxima responsable de agricultura de la Comisión Europea que la futura reforma de la OCM del sector debe apoyarse en tres principios fundamentales: corresponsabilidad de todos los eslabones del sector, desde la producción al comercio; condicionalidad de las ayudas públicas a que éstas repercutan positivamente en la renta del agricultor y verticalidad, que permita la organización del sector en su conjunto.
El también Presidente del Comité Consultivo de Vino de la UE ha solicitado que la nueva OCM mantenga el presupuesto comunitario asignado al sector vitivinícola. “Se necesitan instrumentos que permitan acceder y posicionarse en los mercados para garantizar la renta de los agricultores como único medio de garantizar su permanencia y esto no es posible sin un decidido apoyo a la comercialización y modernización de estructuras. Debemos tener una vocación más comercial, porque nuestro problema no es el producto sino el mercado”, ha matizado.
Por otro lado, Sánchez-Brunete se ha reafirmado en la necesidad de mantener el modelo de viticultura europeo, basado en las denominaciones de origen y las Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP), pero ha abierto la puerta a flexibilizar ciertas prácticas enológicas –como la de utilizar virutas de roble para el envejecimiento del vino-, con el fin de competir en igualdad con terceros países.
Durante esta semana, Manuel Sánchez-Brunete continua con la ronda de contactos que está realizando por las principales regiones vitícolas españolas. Tras visitar en semanas anteriores, Cataluña, la Comunidad Valenciana y Castilla La Mancha, mañana participa en el Encuentro Vitícola Regional en Jumilla, el jueves 23 participará en Murcia en una rueda de prensa, y el viernes se desplazará a Andalucía para presidir por la mañana en Sevilla la reunión de la sectorial vitícola, y desplazarse por la tarde a Jerez de la Frontera, en donde está previsto una reunión con representantes del sector y una rueda de prensa. La semana que viene visitará la Rioja