La reforma de la OCM de frutas y hortalizas modifica el régimen de intercambios comerciales con terceros países
Entre los cambios fundamentales que introduce la propuesta de texto legislativo de la Comisión Europea para la reforma de la OCM de frutas y hortalizas se encuentra la supresión de las restituciones a la exportación
Entre los cambios fundamentales que introduce la propuesta de texto legislativo de la Comisión Europea para la reforma de la OCM de frutas y hortalizas se encuentra la supresión de las restituciones a la exportación, que en la actualidad se aplican a un grupo reducido de productos, entre los que destacan tomate, melocotón, uva de mesa y cítricos.
El presupuesto de restituciones a la exportación ha seguido una tendencia fuertemente decreciente en los últimos años, habiendo pasado de 39 millones de euros en 2004 a 15 millones de euros en 2006. La caída del presupuesto de restituciones refleja tanto las dificultades de acceso a los mercados de otros países por barreras ficticias fitosanitarias como la ampliación de la UE.
Con relación a la regulación de las importaciones de frutas y hortalizas procedentes de terceros países, la propuesta de texto legislativo de la OCM mantiene los instrumentos básicos en vigor; es decir, las licencias de importación, el régimen de precios de entrada, los derechos adicionales de importación, los contingentes arancelarios de importación y la cláusula de salvaguardia.
Respecto a los instrumentos mencionados, la propuesta de texto legislativo de reforma no introduce cambios significativos sobre la regulación actual, estando algunos de ellos pendiente de modificación por la Comisión Europea, como el régimen de precios de entrada, que ya ha manifestado su voluntad de hacerla coincidir con el proceso de reforma del conjunto de la OCM.
En este sentido, FEPEX considera necesario reforzar el régimen de aplicación de los precios de entrada, ya que como ha reconocido la propia Comisión Europea no se están pagando los derechos de aduana adicionales, y establecer un sistema ágil de implantación de los certificados de importación, que garanticen su eficacia cuando se producen graves distorsiones en los mercados de importación.
Para FEPEX, la reforma debe ser una oportunidad para establecer un régimen de importación más eficaz, con el fin de que contribuya tanto al sostenimiento de los mercados comunitarios como de los mercados a la producción en los países de origen de las importaciones, ya que se ha observado también en los últimos años un fuerte deterioro de los precios percibidos por los productores en los terceros países como consecuencia de la desregulación creciente del mercado comunitario.