La Asociación Agraria-Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Castilla-La Mancha ha demandado que los agricultores puedan participar activamente en la elaboración de los planes de desarrollo rural por considerar que los fondos comunitarios destinados a este fin deben repercutir directamente en la mejora de la calidad de vida de los municipios lo que, en su opinión, está íntimamente ligado a la evolución de la agricultura y la ganadería.
Así lo manifestó el secretario general de ASAJA de Castilla-La Mancha, José María Fresneda, en la mesa redonda sobre “Agricultura y Desarrollo Rural en la Europea de los 25” organizada en el marco de las actividades de la Semana del Desarrollo Rural celebrada en Cuenca.
Fresneda lamentó que los gastos previstos por la Unión Europea para el período 2007-2013 hayan disminuido en 19.503 millones respecto a la propuesta original y denunció que una vez más haya sido la agricultura la que ha pagado los platos rotos de la negociación.
Es por ello que Fresneda demandó que los fondos de la Política Agraria Comunitaria (PAC) desviados a Desarrollo Rural repercutan en una mejora real de la calidad de vida en el medio rural y destacó que este progreso de los pueblos está íntimamente ligado a la agricultura.
Según el secretario general de ASAJA de Castilla-La Mancha, es esencial dotar a los pueblos de la región de las infraestructuras necesarias, comunicaciones, servicios, etc. sin olvidar que el trabajo es básico para que los habitantes puedan mantenerse en el lugar donde viven sin necesidad de abandonarlo y, en la mayoría de los municipios, la principal actividad económica es la agrícola y ganadera.
Por último, Fresneda recordó el gran el gran papel que juega el sector agrario en la conservación del medio rural, como fuente de ingresos y como medio para fijar la población en las áreas rurales.
