ESPAÑA 20/09/2005
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha recopilado los resultados de la encuesta de los precios de la tierra en 2004, una estadística anual que desde 1983 se elabora en colaboración con las Comunidades Autónomas para medir la evolución del nivel de precios medios de las clases de tierras agrarias más significativas, es decir, tierras libres a la venta y cuyo destino es el de su explotación agraria.
Conforme los datos de esta encuesta, se estima que el incremento medio de precios de la tierra en España durante 2004 ha sido del 5,5 por ciento en términos corrientes, alcanzándose un valor medio de 9.024 euros por hectárea. Para un deflactor del PIB del 3,8 por ciento se obtiene un incremento medio del 1,7 por ciento en términos constantes; por tanto, se mantiene la tendencia alcista de los años anteriores, aunque de forma más moderada que la registrada en la segunda mitad de los años 90.
El conjunto de tierras de cultivo incrementan sus precios un 5,7 por ciento, mientras que los aprovechamientos de prados y pastos suben un 4,2 por ciento debido fundamentalmente a los pastizales.
Las tierras de cultivo que presentan elevaciones de precios superiores a la media son las ocupadas por cítricos y olivar, produciéndose una cierta estabilidad en las pertenecientes a las hortalizas al aire libre y a los cultivos protegidos.
El conjunto de tierras de secano aumenta su precio un 5,3 por ciento frente al 5,8 por ciento del regadío. Se modera el incremento de las tierras de regadío respecto al año anterior.
Con respecto a la evolución por Comunidades Autónomas, se producen aumentos superiores a la media en Canarias, Murcia, Madrid, La Rioja, y en la Comunidad Valenciana, mientras que en Galicia, Cantabria, Asturias, Navarra y Castilla y León se estabiliza.
Finalmente y con referencia a los precios medios generales de las principales clases de tierra se destaca un incremento del 4,6 por ciento en labor de secano, y de un 4,8 por ciento en regadío. Igualmente en viñedo de transformación de secano se produce un incremento de un 4,6 por ciento, produciéndose un notable aumento de un 8,0 por ciento en pastizales de secano, y de un 7,3 por ciento en olivar de transformación de secano.