Mejoras de financión para modernización de regadíos en Cádiz

La modificación del Convenio suscrito por la SEIASA del Sur y Este, y la Comunidad de Regantes del pantano de Guadalcacín supone la ampliación a 25 años del plazo de amortización de la deuda.

Se recoge igualmente el reconocimiento de esa Comunidad de Regantes como beneficiaria de las expropiaciones necesarias para acometer las obras de modernización de regadío

En el marco del Plan Nacional de Regadíos del MAPA, el presidente de la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias del Sur y Este, Juan Carlos Camas, junto a los presidentes de la Comunidad de Regantes del Pantano de Guadalcacín, Rafael Núñez y del Sindicato de Riegos de la misma, Pablo Ruíz, han firmado una addenda de modificación del Convenio de Colaboración existente entre ambas instituciones que regula las condiciones de financiación de las obras de modernización de la zona regable.

El Convenio de Colaboración, suscrito el 21 de diciembre de 2001, establecía un plazo de 17 años contados a partir del año 26 de la finalización de las obras para el pago de la deuda contraída por los regantes, una vez detraídas las ayudas económicas del FEOGA y los pagos del 30,5% del total que ya vienen realizando los mismos en el momento de la ejecución de las actuaciones.

Esta modificación del Convenio suscrita supone la ampliación de 17 a 25 años del plazo previsto inicialmente, para el pago de dicha deuda. Esto supone que los 2.634 regantes de la zona tendrán 50 años desde la finalización de las obras para pagar la deuda, contando con 25 años de carencia, periodo durante el que estarán eximidos de cualquier pago a la SEIASA del Sur y Este por este concepto.

La modificación del Convenio supone una disminución en los pagos de las tarifas anticipadas que los agricultores vienen realizando en las certificaciones de obras, ya que ascendían al 30,5% del total, y que pasarán a partir de este momento al 26,4%.

Por otra parte, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación reconoce como beneficiaria de las expropiaciones necesarias para acometer la modernización de estas zonas regables declaradas de Interés General, a la propia Comunidad de Regantes, con lo que pasará a ser titular de todos los bienes que se expropien o de las servidumbres que se establezcan sin que la nueva situación les suponga un mayor esfuerzo económico.