La Cámara aprobó una resolución, centrada en la sequía que padece Portugal, que reclama, especialmente para los pequeños agricultores, dinero suficiente para cubrir los gastos extraordinarios provocados por sequías (alimentación de ganado, captación de agua, apoyo a cultivos más afectados como patata o cítricos).
Los eurodiputados consideran que debe anticiparse ''en su totalidad'' los pagos de las ayudas agrícolas correspondientes a los agricultores.
También alertan de la necesidad inmediata de que se pongan a disposición ''créditos y medios con objeto de que pueda prevenirse a tiempo un mayor número de incendios forestales el próximo verano a causa de la sequía''.
El eurodiputado Ignasi Guardans (CiU) comentó que ''si no llueve en Portugal tampoco llueve en España'', por lo que consideró estas medidas aplicables a toda la Península Ibérica.
En su opinión, la Comisión Europea tiene la responsabilidad de responder a las consecuencias del cambio climático, que a veces son dramáticas'' y afectan no sólo a la agricultura sino también a sectores como el turismo.
En nombre de la Comisión, el comisario europeo de Pesca, Joe Borg, afirmó que el Ejecutivo comunitario ''es muy sensible'' a los efectos que provocan las sequías ''y al dolor que causan''.
''Haremos todo lo posible por ayudar a la comunidad agrícola'', respondió, ''creando una estructura permanente para afrontar este tipo de situaciones''.
Un aspecto importante de la resolución parlamentaria es la petición de que se estudie la posibilidad de utilizar el Fondo de Solidaridad para hacer frente a situaciones de sequías, sobre todo en la Europa meridional.