El grupo lácteo italiano Parmalat presentó una demanda contra el banco suizo UBS, al que le exige que le devuelva 290 millones de euros, más los intereses, en relación con dos emisiones obligatorias de bonos, informó la sociedad.
El comisario extraordinario de Parmalat, Enrico Bondi, encargado de reflotar el grupo lácteo, presentó la demanda ante el Tribunal de Parma (norte italiano), amparándose en la ley italiana para los casos de bancarrota, como es éste.
La restitución de los 290 millones de euros se refiere a la operación efectuada en julio de 2003 relativa a dos emisiones obligatorias de bonos por valor de 420 millones de euros.
Parmalat compró al UBS obligaciones del Banco Trotta & Acores por valor de 290 millones de euros.
Estas obligaciones, según Parmalat, eran notas ligadas a créditos (''credit link notes) suscritas por UBS para protegerse del riesgo de insolvencia del grupo lácteo italiano.
La banca UBS informó en Milán que la operación fue ''totalmente válida'' y que se opondrá ''con todas sus fuerzas'' a los deseos de Parmalat.
Esta es la segunda demanda de resarcimientos que realiza Parmalat en pocos días.
El pasado 29 de julio anunció que llevaría a la firma financiera estadounidense Citigroup a los tribunales para exigirle una indemnización de 10.000 millones de dólares por su supuesta
responsabilidad en el hundimiento financiero de la compañía.
Bondi depositó ese día ante el Tribunal Superior de Nueva Jersey (EEUU) un acta de citación contra la entidad, que en 2001 colocó en el mercado bonos de la agroalimentaria por valor de
250 millones de euros.
Parmalat fue declarada insolvente el pasado diciembre tras detectarse un agujero financiero que se estima en 14.800 millones de euros.
El gigante agroalimentario italiano se encuentra actualmente inmerso en un programa de reestructuración industrial y financiera, que prevé la distribución a los futuros accionistas de una cuota no inferior al 50 por ciento de los beneficios distribuibles que se obtengan en los próximos quince años de actividad.