ESPAÑA 01/07/2004
El sector fresero de la provincia de Huelva facturó en la campaña que acaba de finalizar 330,3 millones de euros, un 8,93 por ciento más que el pasado año, y generó 4.520.750 jornales, según datos facilitados por la Asociación Onubense de Productores y Exportadores de Fresas (FRESHUELVA).
La producción total de las 6.955 hectáreas plantadas ascendió a casi 280 toneladas de fruta, de las que 226 se dedicaron a la venta en fresco y 53 toneladas a la producción para industria.
La producción por hectárea comercializada se situó en 40.253 kilos, calificado por FRESHUELVA como ''bueno o muy bueno, con una calidad excelente'' debido a la buena climatología y a que se ha podido recolectar toda la fruta a tiempo.
Este año, por primera vez en la historia, ha sido España la principal consumidora de la fresa producida en Huelva con casi un 34 por ciento de la producción total, seguida de Alemania con el 27 por ciento del consumo y Francia con el 15 por ciento.
El presidente de FRESHUELVA, José Manuel Romero, añadió en lo referente a la exportación que se van abriendo nuevos mercados poco a poco, principalmente en países del este de Europa como Rusia, Hungría o la República Checa.
A pesar de estos buenos datos de una campaña calificada como ''discreta'' por el sector, el presidente de FRESHUELVA destacó como el aspecto más negativo el bajo precio de venta de la fresa que ha disminuido un 7,8 por ciento respecto al año pasado.
Según Romero, la clave del descenso del precio final de venta de la fresa ha estado en lo que consideran una competencia desleal de la fresa marroquí en los meses de febrero y marzo, donde venden en la Unión Europea sin aranceles a pesar de tener costes de producción mucho más reducidos, acentuado por el incremento de producción, que ha sido de hasta un 130 por ciento en algunos mercados.
Romero insistió en que seguirán denunciando ante la Administración española esta situación y que también lo realizarán en los puntos de venta de los mercados europeos.
Otro de los temas destacados de este año ha sido la llegada de unos 21.000 inmigrantes contratados en sus países de origen, principalmente Rumanía y Polonia, para trabajar como temporeros en la campaña de la fresa, lo que ya supone en torno a un tercio del total de trabajadores, el mayor de la historia.
Este número de trabajadores ha sido considerado excesivo por los sindicatos y por algunas organizaciones que han denunciado que el número de días trabajados al mes ha estado en torno a 15, por lo que gran parte del tiempo los jornaleros han estado desocupados.
Sin embargo, desde FRESHUELVA no se comparte esta opinión, y aseguran que esta situación sólo se ha producido en un determinado momento de la campaña por el cambio en la variedad de cultivo y que el número ha sido acertado para cubrir la demanda de mano de obra, añadiendo que no se ha registrado ningún incidente de gravedad con la llegada de un número tan elevado de inmigrantes.
El presidente de FRESHUELVA anunció que incluso para el año que viene el sector fresero onubense va a pedir que se aumente el número de solicitudes de contratos en origen, una cifra que tendrá que ser autorizada finalmente por el Gobierno español.
Romero insistió en que es una realidad de que cada año se va reduciendo ''vertiginosamente'' el número de españoles que quieren trabajar en una campaña como la de la fresa en Huelva y que es necesario este número de inmigrantes para que se pueda seguir con este tipo de cultivo.