ESPAÑA 14/05/2004
Las cooperativas y productores españoles de frutos secos solicitarán una reunión con responsables del Ministerio de Agricultura (MAPA) para que solicite a la Unión Europea (UE) que las ayudas de la almendra se concedan a pesar de la reducción en la producción provocada por las heladas.
Así lo anunció en declaraciones el director de la Federación de Cooperativas Agrarias de Cataluña (FCAC), Joan Gené, que coordinó la reunión de cooperativas y productores europeos del sector que tuvo lugar en Bruselas, con representación de Francia, Italia, Grecia, Chequia y Polonia, además de España.
Gené explicó que las ayudas se otorgan a través de los programas operativos, que exigen que la producción se comercialice para recibir la subvención y que, dado que la producción española caerá el 62,5 por ciento en la actual campaña hasta las 11.000 toneladas, la comercialización disminuirá en la misma cuantía y con ella el monto de las ayudas.
Añadió que, para que la Unión Europea haga efectivos la totalidad de los programas operativos, es necesario que el Gobierno español, ante la reducción de la producción, eleve una petición a la Comisión Europea, ya que el resto de países productores europeos no han sufrido daños por heladas y esperan una campaña normal (unas 10.000 toneladas en total).
Gené anunció además que en la misma reunión se solicitará al MAPA una aplicación distinta de la reforma de la Política Agraria Común (PAC) en el sector de los frutos secos, para adoptar criterios similares a los de Italia.
Afirmó que mientras España vincula las ayudas estatales a las comunitarias, Italia reparte el sobre comunitario de forma independiente, lo que supone una mayor aportación por hectárea.
Por otro lado, en relación a la avellana, Gené detalló que se espera un aumento del precio mundial por causa de una previsible caída en la producción de Turquía, que habitualmente ronda las 100.000 toneladas, pero que en esta campaña se ha visto afectada por un invierno excesivamente frío.
Resaltó que en 2003 el precio en origen del kilo de avellana fue de 1,8 euros (2,2 dólares), mientras que en este año está subiendo y casi ha alcanzado ya 2,9 euros (3,5 dólares); incluso se prevé que en 2005 llegue a los 3,3 euros (cuatro dólares) por kilogramo.
Gené matizó, no obstante, que esta previsiones deberán confirmarse en el mes de julio, cuando se reúnan con los productores turcos y conozcan los datos de producción definitivos de Turquía.
Del resto de asuntos que se trataron en la reunión, el director de FCAC destacó que, puesto que los productores de frutos secos cuentan con cierta seguridad en sus rentas, se ha planteado el desarrollo en los próximos años de proyectos de I+D y promoción de las variedades europeas, todo ello antes de que Turquía, el gran competidor de los miembris comunitarios, se incorpore a la UE.
