ESPAÑA 28/05/2004
Los representantes de empresas vitivinícolas y los fabricantes de cervezas y bebidas espirituosas rechazaron una armonización fiscal en las bebidas alcohólicas y la imposición de una tasa al vino, aunque cada sector matizó su posición en función de sus particularidades.
Así, la Federación Española del Vino (FEV), que aclaró que para modificar los impuestos tiene que haber una propuesta de Directiva que ahora no hay, valoró que el informe de la Comisión incluye como aspectos positivos la desvinculación de la salud pública con la fiscalidad y las mejoras en la Política Agraria Común (PAC) .
Añadió que, vinculado al informe de la Comisión, está la adopción de la propuesta de la Comisión Europea sobre ventas a distancia que establece que las ventas directamente a particulares serán gravadas con los impuestos vigentes en el país de origen, que puede beneficiar a las ventas de pequeñas bodegas y por internet.
Para FEV, más preocupante es la Constitución Europea, que tras una enmienda a propuesta de Irlanda, introduce una referencia al abuso del alcohol y del tabaco, ''en pie de igualdad, que impediría la armonización de la legislación en la materia, dejando en manos de los Estados miembros la política interna''.
Según la Asociación Empresarial de Bodegas de Vinos de España (Avimes), la propuesta de armonización de los impuestos especiales sobre las bebidas alcohólicas, incluido el vino, ''debe ser rebatida con el progresivo descenso del consumo de vino sobre todo los países productores como España y Francia''.
Aseguró que la Comisión debe diferenciar del conjunto de bebidas alcohólicas el vino, que es un alimento, y ''buscar otras fuentes de financiación para la ampliación''; al tiempo que valoró que un acuerdo de alza de impuestos precisa de la unanimidad, ''por lo que la oposición de España, Francia e Italia impediría esta hipótesis''.
Según sus estimaciones, la ''pretensión impositiva'' rondaría entre 0,12 y 0,15 euros por litro.
El director general de Cerveceros de España, Jacobo Olalla, avisó de que por las diferentes pautas de consumo en la UE ''no cabe homogeneizar las mismas medidas para todos los países'' y subrayó la diferencia entre las bebidas fermentadas de origen agrario y uso alimentario como el vino, la cerveza y la sidra, con las destiladas de alta graduación.
Afirmó que, en 2002, los impuestos especiales para la cerveza ya subieron un ocho por ciento, ''por lo que no es momento para una nueva revisión'' y señaló que la cerveza, a pesar de su baja graduación soporta un impuesto especial de 0,09 euros, frente al vino que no tiene impuesto especial.
Aclaró que el problema de las compras transfronterizas se produce sólo en cinco de los 25 países, que tienen unos impuestos tan altos que provocan que los ciudadanos se sientan atraídos por la compra de bebidas alcohólicas en los países limítrofes, problema que afecta a España y ''hay que considerar los efectos en inflación''.
Desde la Federación Española de Bebidas Espirituosas (FEBE), abogaron por una planificación consensuada y valoraron la búsqueda de consenso del informe de la Comisión sobre impuestos especiales a las bebidas alcohólicas, ''que no impone medidas inmediatas sino un debate y una actualización planificada en el tiempo''.
Recordó que los impuestos especiales en espirituosos en España es equiparable al de la UE, teniendo en cuenta el nivel de renta y esfuerzo fiscal de los consumidores españoles, y superior al de países como Francia, Alemania o Italia, y agregó un alza impositiva sería ''injustificable'' por razones de convergencia con la UE.
Aseguró que una revalorización de tipos mínimos de la Directiva no afectaría per se al tipo aplicado a los bebidas espirituosos, pero reconoció que la revalorización homogénea planteada en el informe de la Comisión, ''implicaría un agravamiento de la discriminación entre las distintas categorías de bebidas alcohólicas''.
Los datos de la FEBE el tipo mínimo en euros por litro de alcohol puro es de 5,5 euros en espirituosos, de 2,5 euros para productos intermedios (vinos de licor, vermú), de 1,87 euros en cerveza y no existe en el caso del vino.