ESPAÑA 22/12/2004
La Conferencia Sectorial de Agricultura acordó en Madrid posponer el debate sobre la aplicación del artículo 69 del reglamento de reforma de la Política Agraria Común (PAC) -que permite retener hasta un diez por ciento de las ayudas de pago único para destinarlas a desarrollo rural- al primer semestre de 2005.
Así lo anunció la ministra de Agricultura, Elena Espinosa, tras la reunión con los consejeros autonómicos, donde se aprobó el modelo de aplicación de la reforma de la PAC, con el voto favorable de ocho Comunidades Autónomas -Aragón, Asturias, Andalucía, Cataluña, Cantabria, Extremadura, Castilla-La Mancha y País Vasco-.
El artículo 69 ha sido uno de los aspectos más controvertidos de la reforma, ya que algunas Comunidades Autónomas solicitaban al Ministerio de Agricultura (MAPA) más concreción en el uso de los fondos procedentes de su propuesta de detraer el cinco por ciento de las ayudas.
Asimismo, la Conferencia aprobó que el 95 por ciento de las ayudas al olivar se concedan en un pago único desvinculado de la producción (desacoplado), propuesta que satisface a Andalucía y Aragón y fue apoyada con matices por Extremadura, Castilla-La Mancha y Cataluña.
Por el contrario, Murcia, la Comunidad Valenciana, Baleares y Navarra criticaron que no tiene en cuenta el olivar de baja producción, por lo que las tres primeras confirmaron que estudiarán recurrir el acuerdo.
En herbáceos, se mantendrán acopladas -ligadas a la producción- el 25 por ciento de las ayudas, con el apoyo expreso de Extremadura y matizado de Castilla-La Mancha y Aragón, en tanto que Castilla y León criticó que se haya impuesto este criterio en contra de diez Comunidades Autónomas.
En ovino y caprino se mantuvo el consenso para desacoplar al 50 por ciento las ayudas, mientras que en ganado vacuno se adoptó la primera opción de las tres que permite la Comisión Europea y así, se mantendrá acoplado el cien por cien de la prima a la vaca nodriza y el 40 por ciento al ternero de sacrificio.
En el caso del tabaco, se adopta un desacoplamiento del 60 por ciento, aunque se solicitará a la Unión Europea una aplicación de la reforma en función de variedades, lo que permitiría un desacoplamiento total en las explotaciones de Andalucía.