ESPAÑA 27/03/2003
El órgano auditor criticó el funcionamiento de la ''prefinanciación'', medida por la que el exportador agrícola puede recibir un anticipo de la restitución hasta 240 días antes del envío efectivo del producto.
El informe, en el que se analizan esos anticipos en ocho Estados miembros -entre ellos España- resalta que la ''prefinanciación'' causa problemas administrativos importantes y que un pago tan adelantado dificulta el control de las exportaciones, según el responsable de este informe, el británico David Bostock.
Este régimen fue introducido en 1969 para ayudar a mantener la preferencia para los productos comunitarios y, aproximadamente el 11 por ciento de las restituciones se abonan en el marco de ese régimen.
En 2000, de los 5.500 millones de euros abonados por las restituciones, 600 millones fueron anticipados.
La prefinanciación no supone un coste adicional para el presupuesto comunitario, pero su aplicación implica gastos añadidos y medidas de control que son ''caras'', según Bostock.
Este órgano auditor aboga por suprimir el sistema actual y defiende que ''en todo caso, si se pagan adelantos a los exportadores sean en un período muy breve antes de la exportación'', añadió Bostock.
Para el Tribunal de Cuentas, la eliminación de la prefinanciación supondría un ahorro de 100 millones de euros.
El Tribunal señala que cuando las empresas que reciben pagos adelantados transforman mercancías antes de que se produzca el envío (por ejemplo, los cereales en harina o conservas de carne de vacuno) el sistema se hace ''aún más complicado'' y los controles ''no son fiables''.
El informe indica que, concretamente, es muy difícil una auditoría en el sector de vacuno, porque se depositan grandes cantidades en ese régimen y después se exportan en otros envíos diferentes, mezcladas con otras solicitudes de restituciones.
El Tribunal de Cuentas resalta que en 1997 la Comisión Europea ya examinó fallos de este sistema en Bélgica, Alemania, Francia, Italia y Holanda; posteriormente impuso a España una corrección financiera de 26 millones de euros por irregularidades en ese sentido.
Añade que en ciertos casos, los controles específicos no son adecuados y, al hablar de España, alude al precintado incorrecto de las cajas, aunque señala que tras auditoría del Tribunal las autoridades nacionales españolas han mejorado la vigilancia.
La Comisión Europea señaló, en su respuesta al Tribunal de Cuentas, que realizará un estudio sobre el sistema de prefinanciación y reconoce que los controles de la exportación de vacuno son ''incómodos y costosos''.
No obstante, resalta que el anticipo de 600 millones al que se refiere el Tribunal ''no implica ningún coste suplementario para el presupuesto de la UE''.