Un grupo de expertos de la Organización Mundial del Comercio (OMC) examinará la demanda interpuesta por Estados Unidos y Australia contra la Unión Europea sobre sus medidas de protección de indicaciones geográficas que consideran contrarias a las normas internacionales, informaron fuentes de esa entidad.
La decisión de nombrar a ese grupo de expertos fue adoptada en la reunión del Organo de Solución de Diferencias de la OMC tras la falta de entendimiento entre las partes, precisaron las fuentes.
Un representante de EEUU indicó ante la OMC que las medidas adoptadas por la UE para la protección de las indicaciones geográficas de productos agrícolas y alimentarios son discriminatorias.
Según la delegación de EEUU, el sistema vigente ''no permite el registro de una indicación geográfica excepto si se trata de una indicación geográfica de un país que ofrece una protección equivalente a la de la UE''.
Por ello, EEUU consideró que esa premisa de ''reciprocidad'' parece ''incompatible'' con las normas del comercio internacional que obligan de manera general a prestar el mismo tratamiento a los productos nacionales que a los extranjeros.
Criticaron además el sistema europeo que calificaron de ''discriminatorio'', no sólo para las indicaciones geográficas sino también para algunas marcas comerciales, y subrayaron que ''tiene graves implicaciones comerciales para Estados Unidos''.
Entre los ejemplos de productos que no han logrado obtener el sistema de la UE de reconocimiento de indicaciones geográficas señalaron las patatas de Idaho o las naranjas de Florida.
''La UE no debe intentar desviar la atención de las graves deficiencias de su sistema de indicaciones geográficas asegurando que esa disputa está vinculada a razones tácticas'', precisó la delegación estadounidense.
Al contrario, consideró que debería ser un sistema ''no discriminatorio y transparente'' que ofreciera una protección a las indicaciones geográficas de los países miembros de la OMC.
La UE y otros países intentan desde hace tiempo extender el sistema de indicaciones geográficas, que de momento se limita a los vinos y bebidas alcohólicas, a otros productos agrícolas y alimenticios.
Por su parte, los representantes australianos consideraron en su intervención ante el Organo de Solución de Diferencias de la OMC que el sistema implantado por la UE sobre indicaciones geográficas es ''incompatible'' con las normas que rigen el comercio internacional que ''prohíben el trato discriminatorio'' a los productos extranjeros.
Entre los países que han reclamado asistir como terceras partes al litigio figuran México, Nueva Zelanda, Guatemala, la India, Taiwán, Turquía y Colombia.
