UE-agricultura: La Industrias valoran la reforma agrícola y los consumidores decepcionados
Las industrias alimentarias de la UE valoraron la propuesta de Bruselas para reformar la Política Agrícola Común (PAC), mientras que los consumidores comunitarios expresaron ''su decepción''.
La Confederación de Industrias Agroalimentarias de la UE (CIAA) manifestó, en un comunicado, que la propuesta de Bruselas para la revisión ''a medio plazo'' de la PAC es un proyecto ''ambicioso'' que supone una mayor reorientación al mercado y a la producción sostenible, respetuosa con el medio ambiente.
Para las industrias, el Ejecutivo comunitario ha planteado los instrumentos ''necesarios'' para apoyar el desarrollo alimentario y la calidad de los alimentos y para ''responder mejor a las demandas de los consumidores y de la transformación''.
La CIAA señaló que la propuesta de la Comisión ''permite a las industrias un mayor acceso a las materias primas competitivas'', lo que repercutirá en un mayor valor añadido de los productos alimentarios.
Además, la ''desvinculación'' o ''desacoplamiento'' de las ayudas agrícolas de la producción prevista por Bruselas ''facilitará la posición de la UE en las negociaciones ante la Organización Mundial del Comercio (OMC)'', según las industrias.
La CIAA matizó que la propuesta de reforma tiene algunos interrogantes, sobre todo respecto a los ajustes en algunos sectores agrícolas y afirmó que el Ejecutivo comunitario ''debería haber analizado los riesgos que estos cambios implican de cara al abastecimiento de productos''.
Por otro lado, la Oficina Europea de Uniones de Consumidores (BEUC) manifestó, en un comunicado, su ''decepción'' por algunos aspectos de la propuesta de Bruselas.
Los consumidores criticaron que no se hayan abolido las subvenciones a la exportación, ya que ''los ciudadanos están obligados a pagar actualmente por malas políticas que perjudican directamente a los agricultores de los países en desarrollo y en otras regiones del mundo''.
La BEUC reconoció que la propuesta de la Comisión ''tiene elementos positivos, pero no va lo suficientemente lejos para responder a las demandas de los consumidores''.
Apoyó la transferencia de fondos agrícolas en beneficio del desarrollo rural y la mejora del medio ambiente, pero señaló que ''habrá importantes problemas administrativos, políticos y burocráticos a la hora de poner en marcha estos elementos positivos de la reforma''.
Señaló que, por ejemplo, hay dudas sobre cómo se medirá el respeto al medio ambiente a la hora de pagar las ayudas a los agricultores.
Además, la BEUC afirmó que las propuestas del Ejecutivo comunitario ''tienen el riesgo'' de debilitarse durante el proceso de tramitación y decisión.
La propuesta de reforma debe ser aprobada por el Consejo de Ministros de la UE y contar con la opinión del Parlamento Europeo (PE).