ESPAÑA 18/07/2002
El responsable estatal de Frutos secos de COAG-IR, Tomás Paredes, destacó el ''paso importante'' dado por los productores españoles al lograr que las ayudas comunitarias a este cultivo sean definitivas, al igual que la de los cereales, vacuno o leche, pero advirtió que la cuantía que fija la propuesta de reforma de la Política Agraria Común (PAC) es insuficiente.
En conferencia de prensa, Paredes indicó que en la actualidad esas ayudas ascienden a unos 182 euros por hectárea, en tanto que la propuesta del comisario de Agricultura y Pesca, Franz Fischler, plantea una ayuda de 100 euros por hectárea para estos cultivos, que puede ser aumentada en otros 109 euros por los Estados miembros y alcanzar un tope de 209 euros/hectárea.
Añadió que los productores españoles están en contra de esta propuesta, tal como pusieron de manifiesto el pasado lunes en Bruselas, donde representantes de las asociaciones agrarias ASAJA, COAG, UPA, CCAE y Aeofrus, pidieron que la Comisión Europea ''mejore sustancialmente'' las ayudas previstas en la propuesta de reforma de la PAC.
Paredes argumentó que la propuesta supone la renacionalización de las subvenciones, ya que los estados miembros tendrían que volver a confinanciarlas junto con las comunidades autónomas, algunas de las cuales no cuentan con presupuesto para ello, por lo que puede causar agravios entre los agricultores de distintos países y regiones.
Destacó asimismo que la propuesta rebaja en casi el cien por cien la contribución comunitaria respecto a la financiación obtenida hasta ahora, cuando existe el mandato comunitario hasta el 2006 de que se mantengan las rentas de los agricultores.
El dirigente de COAG-IR señaló que los productores españoles también demandan que las ayudas se vinculen a las plantaciones regulares y que ejerzan su actividad para producir, y que las subvenciones sean canalizadas a través de las Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas (OPFH), que, a su vez, deberán garantizar la transparencia y la agilidad en el pago.
Paredes comentó que los productores de frutos secos españoles creen ''excesiva'' la cifra de 800.000 hectáreas que la Comisión Europea está considerando para este cultivo, 300.000 hectáreas más de las que existen ahora, y dijo que con el dinero que se destinaría a estas nuevas hectáreas podría aumentar la ayuda de 100 euros que plantea la reforma.
Paredes indicó que en la reunión celebrada el lunes en Bruselas, en la que la propuesta fue analizada por primera vez por los Quince, ''quedó claro el mensaje de que la agricultura del futuro debe versar sobre cuatro ejes, alimentos de alta calidad, seguridad alimentaria, mantenimiento del medio ambiente y mantenimiento de la población rural'', que ''cumple'' el sector de frutos secos.
