ESPAÑA 16/12/2002
Los Quince tratarán de alcanzar un acuerdo sobre la propuesta de la Comisión Europea para reformar la Política Pesquera Común (PPC) durante esta reunión del Consejo, que podría prolongarse hasta el sábado, día 21.
La urgencia de aprobar la reforma radica en que a finales de 2002 concluye el IV Programa de Orientación Plurianual (POP), que constituye la base legal para la concesión de fondos a la flota.
La polémica propuesta, presentada por Bruselas a finales de mayo, prevé el final de las subvenciones a la modernización de los barcos, que rechazan siete países, entre ellos España.
Después de seis meses de conversaciones, los Quince acuden a la negociación final sin haber variado sus posturas respecto a la reforma, sobre la que ''están abiertos los puntos políticos principales'', como las ayudas o el acceso a los recursos, según fuentes diplomáticas.
España, junto con Francia, encabeza el grupo de los seis países llamados ''Amigos de la Pesca'' (Países mediterráneos e Irlanda), que rechazan el fin de las subvenciones y que podrían tener capacidad de bloqueo.
La presidencia danesa de la UE ultima un texto de compromiso, con el fin de que llegue a los ministros de Pesca antes de que por la mañana se sienten a la mesa de negociación, según otras fuentes comunitarias.
Asimismo, la presidencia prevé reuniones bilaterales con los representantes de los Quince, para promover un acuerdo en este Consejo.
La reforma debe ser aprobada por mayoría cualificada entre los Estados miembros.
Además, el Consejo de Pesca deberá aprobar las cuotas y los Totales Admisibles de Capturas (TAC) para el año 2003.
En su proyecto sobre estas cuotas, la Comisión Europea plantea grandes reducciones para los cupos de merluza, el gallo, la cigala y el lenguado, especies de importancia para la flota española, por lo que el Gobierno español solicitará que se suavicen dichos recortes.
No obstante, este año ''España no sale demasiado mal parada'' en la propuesta de la Comisión Europea sobre TAC y cuotas, en comparación con los recortes planteados en la pesca de especies de relevancia para otros países, como el bacalao.
Por otro lado, el comisario de Agricultura y Pesca, Franz Fischler, tiene previsto proponer a los Quince los cambios legales necesarios para ayudar al sector afectado por la marea negra del petrolero Prestige y responder así a las demandas del Gobierno español.
Entre esas demandas, destaca la flexibilización de los fondos del Instrumento de Financiación y Orientación Pesquera (IFOP) o que se destinen fondos del plan de reconversión de la flota de Marruecos que no han sido empleados, a los pescadores perjudicados por la catástrofe del Prestige.
Otro cambio previsto por la Comisión Europea consiste en un aumento del porcentaje que, dentro del IFOP, puede destinarse a ayudar a los pescadores por cese temporal de actividad (actualmente es de 4 por ciento).
Bruselas propondrá también que el IFOP permita que sean compensados los piscicultores y mariscadores por cese temporal de actividad y que se concedan ayudas por el reemplazamiento de existencias de marisco, la limpieza, la reparación y la reconstrucción de instalaciones piscícolas y de herramientas.
España pidió a la Comisión Europea la reprogramación de 80 millones de euros procedentes de los fondos IFOP y la extracción de 30 millones de euros del plan para la flota que faenaba en Marruecos, con el fin de ayudar al sector afectado por la marea negra.