Coag denuncia la pasividad del gobierno frente a las reformas fiscales anunciadas desde el gobierno francés
El Gobierno francés ha anunciado una seria de medidas: reducciones de la fiscalidad, supresión del impuesto de circulación, aplicación de una tasa a las empresas petrolíferas ...
El Gobierno francés ha anunciado una seria de medidas: reducciones de la fiscalidad, supresión del impuesto de circulación, aplicación de una tasa a las empresas petrolíferas... con la intención de frenar las pérdidas ocasionadas por la subida de los carburantes, frente a esto la Unión de Campesinos – COAG denuncia la desidia y pasividad del Gobierno de José María Aznar que hasta el momento apenas a articulado medida alguna para solucionar este tema.
Indudablemente, en opinión de esta Organización, las medidas adoptadas por la vecina Francia, también miembro de la Unión Europea marca un precedente importante que deberían seguir las autoridades españolas y, sobre todo, sitúan al sector agrario de nuestro país en una posición de desequilibrio a la hora de luchar en el mercado con las producciones de sus homónimos franceses. ¿Si Francia toma estas decisiones porque no lo hace el Gobierno de Aznar?.
Sólo en Castilla y León la subida del precio del gasóleo agrícola (Respsol incrementó su cuantía en cuatro pesetas en apenas 5 días) ha provocado pérdidas que rondan los 1.400 millones de pesetas. Además, la crisis del petróleo, unido a las tendencias oligopolistas que ya se pusieron de manifiesto la campaña pasada y que tanto gustan a las petroleras, están provocando una subida de los fertilizantes. Estos dos factores van a provocar que los agricultores de Castilla y León este año vean como su renta cae en cerca de un 8%, porcentaje que habría que sumar al 17% acumulado en los últimos tres años.
Desde COAG se demanda fundamentalmente 4 medidas:
1. Eliminación del Impuesto Especial de Hidrocarburos en el gasóleo agrícola destinado a los ATPs.
2. Establecimiento de un precio social para el gasóleo que debería rondar las 40 pesetas por litro.
3. Control de los precios de los carburantes evitando las prácticas oligopolistas de las petroleras.
4. Reforma fiscal consistente en la reducción de los módulos del IRPF por los cultivos afectados para los agricultores que demuestren su condición de ATP.
Perdidas ocasionadas en Castilla y León en el mes de agosto por la subida del gasóleo agrícola.
