La exportación de vinos tranquilos (no espumosos) se situó en 1,7 millones de hectolitros en el primer trimestre de 2000, lo que supone un descenso de 250.000 hectolitros respecto al mismo periodo de 1999, según informe de la Asociación Profesional Empresarial de Operadores de Vinos de Mesa y Vinos con Indicaciones Geográficas Protegidas de la Tierra (AVIMES).
Las mismas fuentes indicaron que estos resultados de los tres primeros meses del año implican un posible descenso anual de hasta un millón de hectolitros respecto al año anterior.
El secretario general de AVIMES, Rafael Puyó, afirmó que el motivo de este fuerte retroceso de las exportaciones es ''el sobreprecio del vino español y las excesivas pretensiones de determinadas ofertas''.
Matizó que el encarecimiento del vino en España ha provocado que ''los demandantes se retraigan y que los compradores potenciales no compren porque nuestros precios no son competitivos.''
Puyó señaló que, no obstante, confía en que tras la inminente nueva cosecha ''se recupere el mercado ajustando unos precios más reducidos, razonables y equilibrados con respecto al resto de los competidores''.
Durante el primer trimestre de este año, España exportó vinos de mesa tranquilos por un valor de 35.471 millones de pesetas, que frente a los 37.000 millones de pesetas obtenidos en el mismo periodo del año anterior supone una pérdida de casi 1.500 millones de pesetas.
AVIMES especifica que las exportaciones de vinos tranquilos a granel fueron las que registraron un descenso más significativo, al pasar de 1,07 millones de hectolitros en el primer trimestre de 1999 a los 840.407 hectolitros cifrados para los tres primeros meses de 2000.
Dicha asociación añade que los vinos de mesa y de la tierra supusieron el 60 por ciento del volumen exportado y casi el 30 por ciento de los ingresos totales conseguidos.
El volumen de vinos de mesa y de la tierra comercializado a granel alcanzó 632.796 hectolitros en este periodo, mientras que la cantidad que se vendió envasada se elevó a 321.256 millones de hectolitros, con unos precios medios respectivos de 77 y 140 pesetas por litro.