Pp y ciu estudian presentar un plan conjunto sobre carburantes

El grupo parlamentario popular y el de CIU estudian presentar el martes una moción conjunta en el Congreso que incluya medidas ''que contribuyan de manera eficaz a solucionar un problema que efectivamente existe en estos momentos'', como es el encarecimiento de los carburantes.

El portavoz popular de presupuestos, Vicente Martínez-Pujalte, hizo este anuncio después de que el grupo socialista presentara un paquete de medidas para paliar este problema, plan que calificó de ''moción sencillita, demagógica, oportunista y alarmista''.

Martínez-Pujalte respondió a la acusación de ''pasividad del Gobierno ante esta crisis energética'' hecha por la oposición, señalando que desde el Ejecutivo ''se trabaja con solidez'' y que ya se han tomando iniciativas como la congelación del impuesto de hidrocarburos y la adopción en junio de medidas para introducir competencia en el sector de distribución de carburantes.

Por su parte, el diputado popular Luis Gámir acusó al PSOE de ''veleta'' y pidió a los socialistas mayor rigor a la hora de presentar sus propuestas.

En cuanto a la propuesta socialista de imponer a las petroleras una tasa especial sobre sus beneficios extraordinarios como se ha hecho en Francia, aseguró que en el país vecino esto no ha ocurrido.

Explicó que lo que se ha hecho ha sido eliminar una provisión especial para determinadas situaciones de fluctuaciones de precios de la que disponía estas compañías, algo ya existe en España.

Gámir se refirió a la rebaja temporal de impuestos de hidrocarburos como a una ''curiosa técnica acordeón'', por la cual cuando suban los precios de los hoteles habrá que bajar sus impuestos e igual cuando suba el coste de la carne.

Explicó que en el año 73 el gobierno franquista bajó estos impuestos y se pasó de una recaudación de 260.000 millones de pesetas a otra de 250 millones en 1974, todo lo contrario que se hizo en Europa.

Según el diputado popular esta medida llevó a que en España aumentase el consumo de energía mucho más que en Europa y a que los procesos productivos fueran más intensivos en energía'', por lo que el Gobierno que vino después tuvo que volver a subir los impuestos y trasladar a los precios las subidas del crudo.

En cuanto a la propuesta socialista de volver al sistema de precios máximos, Gámir señaló que si se utilizase el mismo esquema que en la pasada década el gasóleo costaría 6,5 pesetas más, la gasolina sin plomo de 95 octanos 8,5 pesetas más y la súper sería 11,5 pesetas más cara.

Según Gámir, el grupo socialista debería abogar más por el diálogo con los sectores más afectados y por la adopción de medidas que afecten al impuesto sobre la renta, el IVA y la modernización de estas actividades.