ESPAÑA 20/09/2000
El ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, aseguró ayer en Valencia que el Plan Hidrológico Nacional (PHN) ''no tiene vuelta atrás y será realidad'', y destacó que no se puede aprobar sin tener en cuenta las aportaciones de todos los ciudadanos ''ni pisoteando a nadie''.
Matas, quien participó en una convención sectorial del Partido Popular, afirmó que el compromiso de José María Aznar y de su Gobierno es aprobar el PHN ''y resolver el problema del agua'' en España, una asignatura pendiente que dura más de 30 años, ''de una vez por todas''.
El ministro aseguró que el PHN, que recoge inversiones de tres billones de pesetas, es ya ''un camino que no tiene vuelta atrás'', y pretende facilitar agua allí donde existe pero no se ha podido aprovechar por falta de infraestructuras, así como que a las zonas donde falta llegue el agua de las cuencas excedentarias.
Destacó que ''sería injusto que el Gobierno planteara cualquier trasvase antes'' de desarrollar actuaciones en las zonas que tienen recursos hídricos pero que necesitan infraestructuras para poder aprovecharlo, y destacó que ''la primera premisa'' del PHN es actuar en esas zonas.
A partir de ahí, señaló, para las cuencas deficitarias, como son la del Júcar y la del Segura, donde por muchas obras que se hagan ''nunca habrá agua suficiente'' y que en la actualidad padecen restricciones, el PHN prevé las transferencias de aguas de las cuencas donde hay sobrantes.
El ministro expresó las ''garantías absolutas de que se va a preservar el caudal medioambiental del río Ebro'', que en la actualidad cuenta con unos 17.500 hectómetros cúbicos y que el PHN fijará en 12.300 hectómetros cúbicos, mientras que de los 5.000 restantes se plantea un trasvase de 1.050 hectómetros al área metropolitana de Barcelona, a la Comunidad Valenciana, a Murcia y Almería.
Aseguró que el Gobierno español ''no quiere que el problema del agua se resuelva enfrentando unos territorios con otros'', ni quiere que se ''abra otra batalla estéril y absurda'', ya que se trata de un proyecto ''nacional, de España, de vertebración del territorio, que se basa en la racionalidad y la solidaridad''.
Preguntado sobre la postura del presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, el ministro dijo que ''plantea otras cuestiones que tendrán que contemplarse a lo largo de la tramitación del proyecto, pero creo que no ponen en duda bajo ningún concepto que el PHN dé agua a quien necesita agua, y haga las actuaciones pertinentes para que esa agua se pueda aprovechar en todos los lugares de España''.
Concluyó que se debe ''distinguir la discusión del fondo del PHN, en definitiva ser capaces de ordenar el agua en todos los lugares de España, y en este fondo creo que estamos básicamente todos de acuerdo, incluso el presidente de Castilla la Mancha''.
El presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, dijo que ''nos vamos a poner al frente de la manifestación para que salga el PHN'' y que ''vamos a mantener un discurso de moderación y sensatez'', sin alentar una ''crispación que a quien más perjudica es a la Comunidad Valenciana''.
