ESPAÑA 12/12/2000
Después de un largo pulso mantenido hasta las 03.30 de la madrugada, Bélgica terminó aceptando las últimas modificaciones a la propuesta de la Presidencia sobre la ponderación de los votos en el Consejo de Ministros de la UE, la institución decisoria de la UE.
Según fuentes diplomáticas, el reparto definitivo atribuye 29 votos a cada uno de los países más poblados (Alemania, Reino Unido, Francia e Italia), y 27 a España y Polonia, los mismos que en la propuesta alternativa presentada por Bélgica durante la última fase de la negociación.
Sólo varían los votos atribuidos a Rumanía, que pasaría a 14, y Lituania, que tendría 7, lo que supone una subida de dos para cada uno respecto a la propuesta belga.
El acuerdo es ''un buen acuerdo'', dijo el canciller austríaco, Wolfgang Schussel.
El primer ministro finlandés, Paavo Lipponen, indicó por su parte que ''el resultado es bueno''.
Finlandia y Austria fueron dos de los países que integraron, junto a Bélgica, Grecia, Suecia y Portugal, un grupo en principio contrario a la propuesta de reparto de votos presentada por la Presidencia francesa de la UE.
Todos ellos, excepto Bélgica, que fue el último en asumir el compromiso, fueron aceptando las modificaciones introducidas por la Presidencia francesa comunitaria.
El nuevo sistema de ponderación se aplicará a partir de 2005.
En esa fecha el número de votos requerido para formar una ''minoría de bloqueo'' en el Consejo será de 88, cifra que aumentará hasta convertirse en 91 en el momento en que ingresen en la Unión los 12 candidatos de Europa central y oriental y del Mediterráneo.
A su vez, el porcentaje de votos necesario para alcanzar la mayoría cualificada irá desde el 71 por ciento antes de la ampliación hasta un máximo del 73,4 por 100 después de ella.
Fuentes oficiales aseguraron que Bélgica obtuvo compensación por la vía de un número de escaños en el Parlamento Europeo.
El acuerdo sobre el nuevo sistema de ponderación de los votos en el Consejo de ministros permitió cerrar un compromiso global sobre el nuevo Tratado de Niza.
Los líderes de la Unión Europea recibieron con aplausos el acuerdo, que fue alcanzado después de cuatro días de intensas negociaciones en esta ciudad de la costa mediterránea francesa.
