ESPAÑA 20/12/2000
La Junta de Andalucía y representantes de los pescadores reiteraron la necesidad de que la UE cierre un acuerdo con Marruecos que garantice su futuro y rechazaron una reconversión de la flota, frente a la que propusieron un plan de adaptación para mantener su actividad.
El consejero andaluz de Agricultura y Pesca, Paulino Plata, y los miembros de la mesa de seguimiento del Tratado de Pesca con Marruecos reunidos hoy en Sevilla, lamentaron el límite del 31 de diciembre como fecha ''artificial'' para concluir un tratado con el país norteafricano y abogaron por que se dé un impulso a la negociación, tras un año de amarre de la flota.
Plata criticó el ''desinterés'' del Gobierno español en estas negociaciones, su ''falta de iniciativa'', reclamó que se suprima de inmediato la fecha de ''corte'' y que se aplace cualquier decisión sobre el final de las negociaciones y anunció que solicitarán una entrevista al presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, para abordar el problema y explicarle los errores cometidos en este tiempo.
Romano Prodi y el comisario de Pesca, Franz Fischler, viajarán a Rabat en enero para reanudar la negociación de pesca, una iniciativa que Plata consideró que va en ''dirección de lo demandado de dar mayor relevancia a las negociaciones'' para permitir primero un acuerdo político que dé paso a otro de tipo técnico.
Recordó que hay 25 convenios entre la UE y otros países y que la mayoría de ellos siguen el modelo marroquí y ''están muy pendientes de lo que ocurre con Marruecos'', como Senegal o Mauritania, por lo que alertó de que ''como se caiga el acuerdo (con Marruecos) van a caer otros tratados pesqueros y eso pone en riesgo la flota europea y la española''.
''No queremos un plan de reestructuración, sino un plan de adaptación de estas zonas al futuro'', destacó Plata, quien añadió que debe permitir que estas zonas pesqueras puedan ver el futuro con tranquilidad, con garantías y con mucha financiación, fundamentalmente, comunitaria.
La Junta y el sector pesquero, que advirtió de que se pueden convocar movilizaciones, resaltaron que lo ideal sería un acuerdo con una vigencia como mínimo de cinco años y que permitiera durante ese tiempo aplicar un plan de adaptación a la nueva realidad.
El presidente de los armadores andaluces, Pedro Maza, subrayó que durante este periodo de negociación los pescadores han mantenido ''una situación de optimismo y de coordinación'' con la Administración para conseguir el acuerdo, aunque se quejó de que ''en pocos días se ha dado un giro de 180 grados'', por lo que exigió que se les informe de la situación y que cualquier plan de pesca sea acordado entre la Administración central, las autonómicas y los pescadores.
