ESPAÑA 29/12/2000
La Junta de Extremadura pedirá al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) que aplique la ''cláusula de excepcionalidad'' recogida en el decreto sobre eliminación de Material Específico de Riesgos (MER) que prohíbe la inhumación o enterramiento de cadáveres de ovino, bovino y caprino en las granjas.
Así lo anunció el consejero de Sanidad y Consumo, Guillermo Fernández Vara, tras la reunión que el Comité de Seguridad Alimentaria ha celebrado en Mérida, ya que, en su opinión, los mataderos españoles no cuentan con la suficiente infraestructura para destruir estos cadáveres y cumplir además su labor de destruir los MER.
''Si se obliga a que hagan ambas cosas, terminarán saturados'', dijo Fernández Vara, que considera que lo lógico que es que hasta que se cuente con la infraestructura adecuada se debería permitir a los ganaderos que sigan haciéndolo como hasta ahora, ya sea enterrándolos o quemándolos en las fincas.
Para Fernández Vara, ''esta es la única manera de que no pase lo que está pasando en otras CCAA, donde se están abandonando a los animales con las orejas cortadas, para que no sea reconocido su propietario'' y añadió que ''no se puede exigir a los ganaderos que hagan algo para lo que no se cuenta con condiciones''.
Además, criticó que en este decreto se establezca que la financiación para la retirada de los cadáveres en las granjas correrá, a partes iguales, entre las administraciones autonómicas, central y los propios ganaderos, ya que, en su opinión, esto fomentará ''la picaresca''.
Fernández Vara, que indicó que el Comité de Seguridad Alimentaria considera este decreto ''negativo, hecho deprisa y corriendo y sin contar con las CCAA '', añadió que si el ganadero además de avisar de la retirada de estos animales debe abonar parte de los gastos ''se lo pensará''.
El consejero también informó de que a partir del 1 de enero y hasta que Extremadura cuente con una planta transformadora de los los MER, solo seis mataderos extremeños -Cáceres, Coria, Plasencia, Jarandilla de la Vera, Olivenza y Villanueva de la Serena- podrán sacrificar vacuno de más de 24 meses.
Así se recogerá en un decreto que publicará el sábado, 30 de diciembre, el Diario Oficial de Extremadura, que además incluirá que la carne de estas reses deberá permanecer en estos mataderos 24 horas hasta que se reciban los resultados de los análisis que, en principio, se seguirán haciendo en Algete (Madrid), hasta que el de Producción y Sanidad Laboral, de Badajoz, tenga los medios.
En este sentido, indicó que espera que en la segunda semana de enero se puedan desarrollar en este centro los ''test prionics'', ya que la empresa suministradora se ha retrasado en su entrega.
El Comité de Seguridad Alimentaria también ha acordado ampliar hasta el 31 de enero el plazo para que los ganaderos comuniquen a la Junta de Extremadura los mataderos con quienes han contratado la eliminación de los MER, dada las dificultades que están teniendo para ello.
