Presidente estaciones servicio pesimista tras reunión con rato

El presidente de la Asociación Extremeña de Empresarios de Estaciones de Servicio, Casto Bravo, expresó su ''pesimismo'' sobre la posibilidad de resolver los problemas que afectan al sector por la subida del precio de los carburantes, tras participar ayer en una reunión con el vicepresidente económico, Rodrigo Rato.

Bravo, que participó en la reunión como tesorero de la Federación Nacional, afirmó que habían ''clarificado muy poco'' y sólo había sido fructífera por la decisión de crear una mesa de negociación donde se debatirán sus problemas de una forma más pormenorizada.

''El señor Rato ha sido determinante en varios temas, como que la competencia se haga a base de muchos puntos de venta y que todas las grandes superficies tengan su estación de servicio'', explicó.

A juicio de Bravo, así no se bajará el precio de los carburantes, ya que argumentó que el control del sector lo tienen las multinacionales, y agregó que se beneficiará además a los empresarios de las grandes superficies en perjuicio del resto.

Como posible solución respecto a la venta de carburante por parte de las cooperativas agrícolas a terceros que no son socios, Bravo señaló que el ministro les había asegurado que se controlaría de forma estricta, aunque insistió en que ''es incontrolable'', ya que en la práctica desde hace tiempo se compra combustible a las cooperativas sin pertenecer a ellas.

Castro Bravo se mostró muy pesimista acerca del futuro de las estaciones de servicio rurales, debido al escaso margen de beneficios sobre cada vez un menor volumen de ventas.

''Todavía hay en Madrid y Barcelona estaciones que venden 16 y 18 millones de litros al año, pero la media de Extremadura estaba en 3.000.000 de litros hace 7 años y hoy está en 1.300.000 litros, con lo que estamos al borde de la rentabilidad'', explicó.

Bravo señaló además que Extremadura tiene una de las mayores tasas de estaciones de servicio del país y está en los últimos lugares en las ventas.