Cómo saber si el agua o superficie está limpia. Los test ATP

En el corazón de la seguridad alimentaria está la prevención. Esto significa que las instalaciones de producción de alimentos deben implementar un programa serio para identificar y corregir posibles riesgos de seguridad.

LA HIGIENE EN LA EMPRESA DE MANUPULADO DE ALIMENTOS

Como parte del enfoque preventivo, los fabricantes de alimentos deben utilizar métodos de seguimiento adicionales para determinar la higiene general del procesamiento de alimentos en áreas de manipulado.

Si la producción comienza en una superficie que no se ha limpiado o desinfectado adecuadamente, el riesgo de contaminación aumenta potencialmente, lo que es peligroso para la salud y los intereses comerciales de la empresa.

Ver los equipos para higiene en lugares de manipulado de alimentos.

LIMPIEZA DE LUGARES DE MANIPULADO DE ALIMENTOS NO SOLO EN AMBIENTES SANITARIOS

Las organizaciones sanitarias tienen desafíos similares. Limpiar y desinfectar para maximizar la seguridad del paciente y reducir el riesgo de transmisión de antibióticos resistentes patógenos. Hoy en día, la conciencia pública de la necesidad de controlar la propagación de enfermedades infecciosas es mayor, lo que lo hace aún más importante que los profesionales sanitarios controlen la eficacia de los procedimientos de limpieza y desinfección. Como resultado, la monitorización se ha empliado más allá de los hospitales y los servicios médicos.

Aquellos entornos de trabajo donde se manipulen alimentos, como; aeropuertos, hoteles, escuelas, residencias de ancianos, etc., necesitan métodos verificados y validados para garantizar que las áreas están limpias y desinfectar para eliminar el riesgo de transmisión de infecciones a sus empleados, personal, clientes y estudiantes.

IMPORTANCIA DE LA LIMPIEZA

Para que la limpieza y la desinfección funcionen, es vital que se haya realizado correctamente. Aunque podríamos pensar lo contrario, los desinfectantes no están diseñados para eliminar material orgánico, ya sea bacteriano, viral o sobrante de alimentos. los desinfectantes están hechos para asegúrese de que las superficies limpias se mantengan libres de microbios.

Incluso después de la limpieza, las superficies pueden tener zonas que pueden albergar potenciales patógenos, por lo tanto es fundamental no solo limpiar, sino también desinfectar y confirmar que estén libres de contaminantes.

Los fabricantes de alimentos y los comedores de instalaciones sanitarias, tradicionalmente han realizado inspecciones visuales o pruebas microbianas para llevar a laboratorio, para saber si son seguros y están libres de posibles patógenos. Estas pruebas visuales son imprescisas e inaceptables, mientras que las pruebas microbianas en laboratorio son caras, requieren mucho tiempo y se tarda en obtener los resultados.

Para solucionar esta situación, se dispone de un sistema rápido, fiable y fácil de usar, que es la monitorización de trifosfato de adenosina (Test de ATP) mediante luminómetros.

CÓMO SABER SI EL AGUA O UNA SUPERFICIE, ESTÁ REALMENTE LIMPIA, GRACIAS AL USO DE TEST ATP

Los test ATP (trifosfato de adenosina) proporcionan resultados en segundos y son sensibles, cuantitativos, eficaces y simples.

Los microbios y los residuos de producto contienen ATP, un indicador de residuos biológicos que puede ser fácilmente detectado para medir la limpieza. Una limpieza en profundidad eficaz elimina todo el ATP de las superficies de contacto (o líneas de producción en el caso de procesadores de alimentos). Un análisis de la limpieza que obtenga concentraciones de ATP indica que la superficie no cumple las normas de limpieza y deben volver a limpiarse.

Las instalaciones de producción de alimentos han utilizado la monitorización de ATP durante décadas, ahora es parte de su monitorización para cumplir con las pautas de HACCP. La normativa define claramente los procesos de control de limpieza y saneamiento, validación y verificación.

Se considera a ATP como una molécula indicadora de la presencia de residuos biológicos, por lo tanto, medir los niveles de ATP le permite conocer la eficacia de la limpieza.

Para medir ATP, se toma una muestra de una superficie o agua a través de un hisopo (escobilla con residuos) y se coloca en un dispositivo de lectura, un luminómetro, el cual, mediante bioluminiscencia, ofrece la lectura en Unidad de Luz Relativa, o RLU. Cuanto mayor sea la RLU, mayor es el riesgo potencial de contaminación .

Monitorizar ATP no identifica directamente qué bacterias o virus son, en cambio, detecta la presencia de materia orgánica, donde bacterias y virus puede crecer y multiplicarse.

RLU más altas indican la presencia de contaminantes potenciales y puede ser necesaria una limpieza. Cada instalación debe establecer sus propios niveles aceptables para garantizar una limpieza y se ha realizado el saneamiento.

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